El Tribunal Supremo ha confirmado la condena a 22 años y seis meses de prisión que la Audiencia Nacional impuso a Asier R. L. por intentar asesinar a dos miembros de la Ertzaintza mediante el lanzamiento de cócteles molotov en el interior del automóvil que ocupaban.

La sentencia ahora confirmada, que condenaba por dos delitos de asesinato terrorista, consideró probado que en agosto de 2001 el condenado, junto a otros muchos jóvenes, algunos de ellos también condenados por estos hechos, lanzaron artefactos incendiarios y dañaron el mobiliario urbano dentro de la estrategia de algaradas callejeras favorables a ETA que venían manteniendo.

En el curso de aquellos sucesos los implicados reconocieron a los ertzainas atacados dentro de su coche camuflado y rodearon el vehículo, lo que incluyó la colocación de un coche en la parte posterior del mismo para impedirle circular.

Una vez inmovilizado el vehículo y sus ocupantes, lanzaron contra los mismos piedras, tornillos y otros objetos y rompieron los cristales del coche, después de lo cual arrojaron al interior del mismo cócteles molotov que provocaron graves quemaduras a los dos policías. Fue necesaria la intervención de otros agentes, que hicieron disparos al aire, para que los ertzainas consiguieran escapar.

El pasado 7 de mayo el Supremo revisó la sentencia de la Audiencia y ahora la confirma, después de rechazar los argumentos de la defensa que trataban de invalidar las pruebas de ADN valoradas en la condena.