Los vecinos del edificio que ardió en el Campanar, en Valencia, aún no han podido recuperar las pocas pertenencias que les puedan quedar tras el trágico incendio que se ha cobrado la vida de diez personas, entre ellas, dos niños.

Sin embargo, en la pasada madrugada, la Policía ha tenido que acudir al edificio, pues unos fuertes ruidos metálicos alertaron a los agentes que se encontraban patrullando por la zona.

En un primer momento, los ladrones pudieron escapar, pero solo unos minutos después, fueron localizados y detenidos. En el registro, los agentes descubrieron que los ladrones se habían hecho con grifos y materiales de fontanería.

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"Días antes ya habían identificado a varias personas que merodeaban en actitud sospechosa", ha señalado el periodista Javier Martínez que, además, ha tildado a los ladrones de "miserables" por haberse aprovechado de la tragedia.

"Estos individuos estaban robando, a lo mejor, los únicos objetos que estas familias podrían aprovechar de sus viviendas calcinadas. Sobre las 2:00 horas, unos policías escuchan unos golpes metálicos procedentes del edificio siniestrado, de inmediato piden apoyo, ya que es un complejo muy grande. Una vez que entran, los ladrones salen corriendo, pero a los minutos los agentes los interceptaron", ha agregado el periodista.