Los concursantes de pleno derecho de Supervivientes se llevaron una gran, aunque no grata, sorpresa al conocer la existencia de un concursante secreto durante la última semana.

Raquel Arias, expulsada durante la semana pasada, tuvo la misión de estar escondida en la selva, a 15 metros del resto del grupo, sin ser descubierta para poder volver a concursar. 

Tras la expulsión de Artùr, el programa abrió una votación exprés para elegir quién volvía definitivamente a España, que fue él mismo. Alma Bollo y Jonan mostraron su desagrado hacia la vuelta de un concursante en la palapa. 

"No veo el fin. Esto de ser un día seis, otro cinco y luego seis, nos desestabiliza", sentenció la hija de Raquel Bollo. "Te entiendo, pero esto lo ha decidido la organización por el estado de salud de Manuel", explicó Carlos Sobera. 

Manuel Cortés tuvo que abandonar el concurso por motivos de salud, por lo que "debían tener un número de concursantes para llegar bien de tiempo a la final", justificó el presentador. "Ahora quedaréis los que tendríais que haber quedado", concluyó.