Dos de los concursantes que habían estado al borde de la expulsión de Gran Hermano VIP, Albert Infante y Laura Bozzo habían prometido que si se salvaban se bañarían desnudos en la piscina de la casa de Guadalix de la Sierra. Y se salvaron. 

Así que el bailaor catalán de 23 años y la comunicadora peruana de 72 no dudaron en cumplir su promesa este domingo, cuando se desnudaron y se metieron en directo en la piscina del exterior de la casa. 

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Infante no dudó en hacerlo completamente desnudo, tapando apenas sus partes íntimas con las manos y la concursante se dejó solo la parta de abajo del biquini y aunque en principio se tapó los pechos con las manos, acabó por enseñarlos también. 

"A mis nietos les pido perdón, pero lo que prometo lo cumplo", decía Laura Bozzo antes de ir a la piscina. Ambos cumplieron con la asistencia de Carmen Alcayde, que les ayudó a desnudarse y a meterse en la gélida piscina. 

"Prometí que me iba a bañar desnuda y... bueno, ahí estoy", decía Bozzo antes de mostrar sus pechos, mientras Albert, más jocoso, saltaba y gritaba diciendo "¡estoy desnudo!".