El tráfico de migrantes en Reynosa, México, se ha convertido en un verdadero problema. Este jueves, El programa de Ana Rosa ha emitido un reportaje en el que han mostrado las condiciones del campamento en el que se ven obligados a vivir los aspirantes a cruzar el río Bravo que los separa de Estados Unidos.

Así, el matinal de Telecinco ha podido hablar con varios de los migrantes que tratan de seguir adelante con las pobres condiciones de vida que les ofrece el campamento organizado por los coyotes. De esta forma, uno de los organizadores ha hablado ante las cámaras del programa sobre la prostitución en el campamento.

"Bueno, sí, tenemos como unas 30 personas, 30 mujeres. Prostitución de migrantes no hay como tal, no tenemos ningún migrante prostituyéndose", señala uno de los líderes. Asimismo, el programa ha podido hablar con Ana, una mujer víctima de violencia machista que decidió huir de su pareja con sus dos hijos pequeños.

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"Me salí de mi hogar, estaba con mi madre... Fue muy duro, yo estaba cómoda y dejar todo... Yo tenía trabajo donde estaba y dejé todo. Y aquí estamos", señala Ana, que ha explicado cómo les cuenta a sus hijos por qué están donde están: "Les digo que vamos a llegar a un lugar más bonito. Ellos me preguntan cuándo nos vamos porque ya llevamos dos meses aquí y yo les contesto que tengan paciencia, que ya pronto nos iremos".

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El matinal también ha podido hablar con Djbril, un migrante de Haití, que ha sido tentado por los narcotraficantes, quien ha destacado que es inevitable "echar de menos" a su gente y su país. Desde el plató de El programa de Ana Rosa, Joaquín Prat ha recalcado: "Es tan tremendo que esto suceda a apenas unos cientos de metros de la frontera de la primera potencia mundial, del primer país del mundo, de la economía más desarrollada... Y resulta que tienes a 6.000 personas hacinadas en esas condiciones, en tiendas de campaña, buscando una vida mejor porque, en el caso de Ana, de lo que huía era de un maltratador".