La huelga, que se prolongará hasta mañana, retrasó la entrada y salida de varios barcos e impidió la carga y descarga de numerosas embarcaciones en las principales terminales de Galicia, como Ferrol, A Coruña, San Cibrao, Marín, Vilagarcía y Vigo.

Precisamente, en la ciudad olívica se concentraron ayer decenas de afectados que pedían la retirada de una directiva que, en su opinión, es un «despido encubierto». Las protestas tuvieron también presencia en Bruselas, ante la sede del Parlamento Europeo.