La huelga general en protesta por la reforma laboral será el 29 de septiembre próximo, según confirmaron los secretarios generales de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, y de UGT, Cándido Méndez. No obstante, la fecha ya había sido adelantada por el secretario general de Metal, Construcción y Afines de UGT, Manuel Fernández López Lito.

En rueda de prensa conjunta y multitudinaria, Méndez y Toxo explicaron que la huelga se ha convocado porque han constatado que el texto del Gobierno lesiona los derechos de los trabajadores.

La fecha elegida por los sindicatos coincide con la convocatoria de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) para el "día europeo de acción", que consistirá en manifestaciones en Bruselas y en otras ciudades de la UE bajo el lema "no a los recortes, más crecimiento". Es por ello que la del 29 de septiembre era una de las fechas que se barajaron desde el principio.

La de septiembre será la séptima huelga general de la democracia y la primera contra una decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

"Dos grandes escalones" previos

Preguntados por la posibilidad de que el Gobierno rectifique y ellos desconvoquen la protesta, Méndez respondió que la huelga irá adelante porque tienen "el convencimiento de que el Gobierno no puede dar marcha atrás".

Según explicó, de aquí al 29 de septiembre va a haber "dos grandes escalones" de movilización: el primero será el 30 de junio, en el que se convocarán y celebrarán concentraciones en las distintas comunidades como un paso previo hacia la huelga general y el segundo será el 9 de septiembre, cuando se convocará en Madrid un "gran acto masivo de representantes sindicales" con la vista puesta en la huelga general.

Blanco pide una respuesta proporcionada

El ministro de Fomento y vicesecretario general del PSOE, José Blanco, afirmó este martes que le gustaría una respuesta proporcionada a la reforma laboral por parte de los sindicatos e insistió en que el objetivo del Gobierno es lograr un mercado de trabajo más flexible que permita crear más empleo estable y acabar con el trabajo precario.

Por su parte, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, destacó que al Gobierno le "habría gustado" llevar a cabo una reforma laboral "acordada y negociada" y recordó que los sindicatos están "en su perfecto derecho" a convocar una huelga general.