El departamento vasco de Interior desmintió "rotundamente" este martes que los detenidos en la última operación contra ETA desarrollada por la Ertzaintza hayan sufrido torturas o malos tratos y aseguró que a los arrestados se les aplicó el protocolo establecido para el régimen de incomunicación.

Los abogados de los nueve arrestados en las dos últimas semanas en Ondarroa (Vizcaya) y Guipúzcoa por su presunta relación con ETA denunciaron este lunes que al menos tres de ellos han sufrido torturas a manos de la Ertzaintza y han tenido que ser atendidos en un centro hospitalario por recomendación del forense.

No obstante, la Consejería de Interior del Gobierno vasco desmintió a través de un comunicado estas acusaciones. Además, aseguró que, siguiendo el protocolo establecido, el período de detención en todos los casos "se llevó a cabo con el debido control procesal, las declaraciones se realizaron con asistencia letrada y fueron grabadas en vídeo y los detenidos fueron examinados por el médico forense cada 24 horas".

Por su parte, el Partido Popular ha instado al departamento vasco de Interior a interponer una querella criminal contra los que han imputado a la Ertzaintza un delito de torturas.