Andalucía ha recibido en los dos últimos años, desde que entró en vigor la Ley de Regulación de la Eutanasia en España, un total de 137 peticiones de personas que querían hacer uso de este derecho, que desembocaron en la apertura de 98 expedientes. De estos, 53 se resolvieron favorablemente, de forma que los ciudadanos recibieron la eutanasia, mientras que otros 45 fueron denegados.
Es el balance realizado por la Comisión de Garantía y Evaluación para la prestación de la ayuda a morir en Andalucía, dependiente de la Consejería de Salud, que este martes ha presentado la Junta. De los 98 expedientes abiertos, solo uno correspondió a una persona menor de 30 años. El grupo más numeroso fue el correspondiente a la horquilla de entre 70 y 79 años, con 28 casos, seguido de los de 50 a 59, con 21 casos; los de 60-69 años, con 16 expedientes; los mayores de 80, con una decena; los de 30 a 49, con nueve casos; y los de entre 30 y 39 años, con siete.
Por provincias, según los datos facilitados por la Junta, la que más casos registró de las 53 eutanasias practicadas fue Málaga, con 16, seguida de Sevilla, con nueve; Cádiz, con ocho; Granada, con seis; Almería, con cinco; Huelva, con cuatro; Córdoba, con tres; y Jaén, con dos.
El informe refleja además que del total de situaciones, 56 solicitudes se presentaron el año pasado, de las que 24 fueron aceptadas. Las 16 que se rechazaron fueron por motivos como el fallecimiento antes del inicio de la tramitación (ocho casos) o por desistimiento (dos). Los tres grupos de enfermedades que más condujeron a estas peticiones fueron las patologías neurodegenerativas (19 expedientes), los procesos pluripatológicos o crónicos complejos (diez) y los casos oncológicos (siete).
Por otro lado, Salud detalló que desde noviembre de 2021 hasta diciembre de 2023 un total de 1.340 médicos de han acogido a la objeción de conciencia al recibir una petición de eutanasia, un "número nada desdeñable", ha señalado el portavoz de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco, que ha defendido que "la objeción de conciencia es una posibilidad que obedece a la ética y la moral de cada uno, y ahí el Gobierno andaluz poco puede decir". Si bien ha apostillado a renglón seguido que, "cuando nos referimos a la eutanasia, la posibilidad de optar a una muerte digna, estamos hablando de un derecho legal" y "reconocido". Por tanto, "más allá de cuál sea la opinión personal de cada uno", la Junta "defiende el cumplimiento y el disfrute de los derechos que los ciudadanos tienen".
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