Con el torso desnudo, ensangrentado y hacha en mano. Así se abalanzó el hombre de 46 años acusado de matar y decapitar a su padre sobre los coches que circulaban por la rotonda de Soto de Rey, en el municipio asturiano de Ribera de Arriba.
Los hechos sucedieron sobre las diez de la noche de este lunes, en una rotonda del punto kilométrico 35,500 de la N-630. Los turismos que circulaban entonces por el lugar alertaron a la Guardia Civil de que estaban siendo atacados por el presunto homicida, que iba armado con un hacha.
"Se puso delante de mí, se empezó a reír y me tiró la cabeza al capó. Al principio, no sabía lo que pasaba hasta que se dio cuenta que era la cabeza desmembrada de un hombre de verdad", relata Arancha Lomba, una de las conductoras atacadas, en declaraciones al medio asturiano La Nueva España. Lo vi jugando como al balón con la cabeza. Debió de tirársela encima a más gente.
Lo vi jugando como al balón con la cabeza. Debió de tirársela encima a más gente.
Arancha regresaba en coche a su casa del trabajo cuando se topó con el ahora detenido. "Cuando pasé, me volví y lo vi jugando como al balón con la cabeza. Debió de tirársele encima a más gente. Algún coche pasó luego con la luna reventada", asegura.
Otro de los afectados también ha compartido con este diario un testimonio similar: "Estaba en el bar tomando una sidra. Y entra una persona conocida que había salido hace cinco minutos y dice: Juaco (al dueño del bar) por favor déjame lavarme que vengo con sangre, una persona mató a otra y anda en la rotonda desnudo pegándole patadas a una cabeza. Y andaba por allí la Guardia Civil y les eché una mano para reducirle, pero me tiró la cabeza", afirma.
De inmediato, se desplazaron hasta el lugar diversas patrullas de la Guardia Civil y, tras localizar al presunto homicida, procedieron a su detención. En cuanto a los automovilistas, el Instituto Armado no ha precisado si se han producido heridos, y la investigación ha quedado en manos de la Policía Científica.
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