A pesar de que las lluvias de los últimos días han aumentado las reservas de agua en los embalses catalanes hasta situarlas en un 16,05%, el Govern se muestra cauto con la sequía y asegura que no flexibilizará las restricciones ni cambiará de fase de emergencia, pese a que el Pla Especial de Sequera (PES) recomienda retirarlas una vez se hayan alcanzado las cifras marcadas por la situación de excepcionalidad.
En la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, la portavoz del Ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, ha desvinculado el volumen de agua en los embalses con un cambio de escenario. Según ha explicado, se deben tener en cuenta muchos contextos y “no tiene sentido” levantar la emergencia para en pocos días tener que volver a aplicarla. Ha añadido que la población necesita “mensajes claros y no contradictorios” ante la improbable previsión meteorológica a largo plazo, que será la que marque las próximas decisiones del Govern.
De esta manera, la portavoz ha confirmado que las lluvias que están cayendo en territorio catalán estos días no son suficientes y que “no es lo mismo tener las reservas a un 16% en mayo que en septiembre”, ya que actualmente estamos “a las puertas de un verano que se prevé seco”.
No obstante, ha garantizado que la intención del Govern es retirar las restricciones lo antes posible porque “no hay ningún interés” en alargarlas. Es más, ha señalado que son conscientes de cómo las medidas para paliar la sequía afectan tanto a las personas como a los sectores económicos.
Una decisión que comparte el conseller de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural, David Mascort, que este martes ha declarado en una entrevista en El Periódico que “siempre es mejor que no haya” restricciones.
Al ser preguntado sobre la posibilidad de retirar las medidas, Mascort ha recordado que siempre repiten que, “si el volumen embalsado no supera por bastante el umbral del 16%, no la retiraremos”. Únicamente lo harían si cae un chaparrón abundante y las reservas aumentan a un 20%, entonces “seguro” que las levantarían.
Suplemento de crédito
Tras la prórroga de los Presupuestos y la continuidad de la sequía, que ya lleva 40 meses afectando a Cataluña, el Govern ha aprobado este martes un decreto ley de suplemento de crédito de 145,2 millones de euros para llevar a cabo inversiones que ayuden a paliar la emergencia climática.
Parte de ese dinero, en concreto 30 millones euros, están previstos para desalinizadoras móviles y el transporte de agua potable en barco hasta Barcelona. Una medida que, según Plaja, "no es una solución estructural, sino de emergencia".
Ha asegurado que el Govern tiene contemplados "todos los escenarios", desde los más optimistas a los más pesimistas. Por lo que los 30 millones son una cifra provisional, que podría aumentar en un futuro. "Se sacará el dinero de donde sea y se hará todo lo posible para que no ocurra que se abre el grifo y no queda agua", ha dicho.
La portavoz ha explicado que para el Ejecutivo catalán es "prioritario e inaplazable" asegurar inversiones para obras de emergencia y la activación de medidas que aseguren el abastecimiento de agua.
Entre las obras que se garantizarán con este suplemento está la ampliación de la Estació de Tractament d'Aigua Potable (ETAP) del Besòs, que contará con un presupuesto de 27,5 millones.
El decreto también incluye partidas para la construcción de pozos profundos y mejoras en la red hídrica (18,6 millones); actuaciones para la prevención de incendios forestales (9 millones); incremento de personal en el Departamento de Acción Climática (9,5 millones) y, una partida dirigida a los sectores agrarios más afectados por la sequía estos últimos meses (50,5 millones).
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