Putin provoca otro 'incendio' con EEUU tras apuntar a Ucrania por el atentado de Moscú y obviar a Estado Islámico

El presidente ruso, Vladimir Putin, enciende una vela en recuerdo por las víctimas del atentado terrorista en la sala de conciertos Crocus City Hall de Moscú.
Putin enciende una vela en recuerdo por las víctimas del atentado terrorista de Moscú
AP / Lapresse
El presidente ruso, Vladimir Putin, enciende una vela en recuerdo por las víctimas del atentado terrorista en la sala de conciertos Crocus City Hall de Moscú.

Moscú vivió el pasado 22 de marzo el que ya se ha convertido en el atentado más sangriento de la historia contemporánea de la capital rusa. Cuatro hombres entraron armados con fusiles automáticos al recinto de la sala de conciertos Crocus City Hall, donde se celebraba el concierto de la banda Picnic. Una vez dentro, llevaron a cabo una matanza que se ha cobrado ya la vida de 137 personas, tres de ellas niños, y ha dejado alrededor de 180 heridos. Ahora, la autoría de esta masacre ha abierto un nuevo frente al mandatario ruso, Vladimir Putin, con acusaciones cruzadas tras reivindicar Estado Islámico la autoría de los hechos. 

Poco después del atentado, el Estado Islámico asumía su autoría, llegando a compartir no solo las identidades de los atacantes sino también las grabaciones que los mismos hicieron en el interior del centro comercial. A esto se sumaba la confirmación por parte de los servicios de inteligencia de Estados Unidos de que la organización terrorista no solo llevaba un mes preparando el ataque, sino que además tendrían tratos fehacientes que no dejaban lugar a la duda de que se trataba de una matanza del ISIS en exclusiva sin colaboración externa alguna. 

Sin embargo, estas pruebas no han sido suficientes para Putin, quien tras más de 24 horas de silencio tras lo ocurrido, este sábado ofreció un discurso en el que apuntaba a una posible conexión del atentado con Ucrania. Según el mandatario ruso, los cuatro sospechosos fueron detenidos cuando se dirigían a la frontera ucraniana donde "les habían preparado una entrada en el lado ucraniano para cruzar".

"Todos los autores, organizadores y los que encargaron este crimen recibirán un merecido e irremediable castigo, sean quienes sean e independientemente de que los hayan enviado", afirmaba con rotundidad Putin, que en todo momento obvió mencionar indicio alguno de que Estado Islámico pudiese estar detrás de los ataques. 

Ante estas acusaciones, Volodimir Zelenski, emitía un comunicado desvinculándose por completo del atentado y asegurando que el líder ruso haría todo lo posible por implicar a Ucrania del atentado para justificar su guerra. 

Poco después, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, afirmaba, sin dejar lugar a la duda, que solo existía un autor material del atentado. "Lo que sabemos es que ISIS-K es en realidad, según todos los indicios, responsable", a lo que añadía que no había evidencia alguna" de que Ucrania estuviese detrás. 

La portavoz del Ministerio de Asuntos exteriores ruso, María Zakharova, echaba más leña a la polémica diplomática con un ataque directo a Estados Unidos. "Ojalá hubieran podido resolver tan rápidamente el asesinato de su propio presidente Kennedy, pero no, después de todo, durante más de 60 años no han podido descubrir quién lo mató. ¿O tal vez también fue ISIS?", se preguntaba.

En medio de lo que empieza a ser un nuevo conflicto diplomático entre las dos superpotencias mundiales, Putin se ha dejado ver de nuevo este domingo únicamente a través de una imagen tomada en la iglesia presidencial a las afueras de Moscú encendiendo una vela y haciendo la señal de la cruz frente a un crucifijo en homenaje a las víctimas del pasado viernes, durante la jornada del luto nacional que se ha vivido en Rusia. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento