Seis días después del asesinato de Nuria, una cocinera de la cárcel de Mas d’Enric (Tarragona), los funcionarios de prisiones catalanas se han plantado para reclamar más seguridad en los centros y la dimisión de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, a los que acusan de irresponsables. “El asesinato de Nuria representa donde nos ha llevado la política nefasta”, ha dicho Sandra, una de las portavoces del colectivo de trabajadores –que no sindicato-, que también es jurista y criminóloga en la prisión de Lledoners.

En una rueda de prensa en el Col·legi de Periodistes para explicar cómo es trabajar dentro de los centros penitenciarios de Cataluña, Sandra, junto a Raquel, Francinca y Gabi, funcionarios de vigilancia, han apuntado que quieren líderes “que sepan lo que es nuestro trabajo”, ya que creen que los actuales “están totalmente inhabilitados”.

Asimismo, han señalado que las protestas que se llevan realizando desde el jueves pasado “acabarán cuando la consellera y el secretario dimitan”. De lo contrario, han instado al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, a que los cese. “Usted tiene la potestad, céselos”, ha dicho Francina, funcionaria de vigilancia del centro donde la cocinera perdió la vida.

Condiciones laborales

La principal queja de los trabajadores es la falta de seguridad y de profesionales. “En las cárceles necesitamos vivir con un orden”, han recordado ya que, de lo contrario, la situación puede ser peligrosa. Además, entre sus reclamaciones también está que se les reconozca como agentes de la autoridad. “Es de sentido común que se nos dote de medidas para poder volver vivos a casa”, han dicho.

Gabi, funcionario de vigilancia de la cárcel de Ponent, ha denunciado que la falta de personal es “muy fuerte” y que llevar a cabo un servicio “con profesionalidad” es prácticamente imposible a pesar de la calidad humana que hay dentro del colectivo.

En el caso de Raquel, una funcionaria de vigilancia en la cárcel de Quatre Camins (Barcelona), ha explicado que trabaja “absolutamente sola, con un bolígrafo que normalmente no va y con un walkie talkie que normalmente tampoco va” sabiendo que en las otras plantas del centro solo hay un compañero y que, “si me pasa algo y mis compañeros me escuchan, vendrán, dejando sus plantas solas, desantendidas”. 

En relación a las posibles agresiones, Raquel también ha criticado que en el caso de que uno de sus compañeros en su defensa, lo haría con el miedo a luego ser expedientados.

Esto es debido, según Francina, a las “políticas del buenismo que ahora se han puesto de moda”. Unas políticas que “han dejado de lado la ley orgánica y general penitenciaria y el reglamento” y que han venido acompañadas de protocolos y circulares que la administración penitenciaria “se ha sacado de la manga” y no les deja trabajar. “Nos atan de pies y manos”, han asegurado. 

Los funcionarios han querido dejar claro que que quieren trabajar, pero con unas "condiciones adecuadas" y que no pongan en peligro sus vidas.

"Manos manchadas de sangre"

La rueda de prensa se ha realizado poco después de que los sindicatos hayan plantado, una vez más, a la Generalitat de Catalunya, que había programado una reunión entre el departamento de Justicia y los sindicatos para abordar la problemática.

En respuesta al "mantra de mano tendida" que la consellera ha reiterado durante sus comparecencias para llamar a los funcionarios a negociar, Sandra ha dicho que ellos no quieren "manos manchadas de sangre, que es lo que nos ofrecen”. De hecho, los trabajadores han convocado para este miércoles una concentración en la plaza Sant Jaume a las 11 horas y más actos de protesta.

Servicios mínimos 

Durante la rueda de prensa posterior al Consell Executiu, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha avisado a los funcionarios de prisiones que tienen la obligación de garantizar el normal funcionamiento de los centros. Además, les ha advertido del "riesgo" que pueden provocar las protestas. 

Asimismo, ha lamentado que los sindicatos sigan negándose a reunirse con la Generalitat. Ante la previsión de más movilizaciones en los próximos días, ha pedido a los sindicatos que convoquen una huelga para garantizar unos servicios mínimos. 

Por otro lado, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Jesús María Barrientos, ha solicitado al Departamento de Justicia que le informe sobre "los servicios mínimos establecidos con ocasión de la huelga de funcionarios de prisiones, en la medida en que la huelga puede afectar a la actividad judicial". 

El bloqueo en los accesos a las cárceles catalanas por las protestas de funcionarios de prisiones obligó este lunes a suspender en Cataluña una cincuentena de juicios y cerca de 70 diligencias judiciales.

Comparecencia en el Parlament

La consellera de Justicia, Gemma Ubasart, comparecerá este jueves a las 9 horas en el Parlament para dar explicaciones sobre la situación actual en las prisiones catalanas y la muerte de una cocinera a manos de un preso.

Según fuentes parlamentarias, ha sido la propia Ubasart la que ha pedido comparecer ante la diputación permanente de la Cámara. Aparte, tanto el PSC, como Junts y Vox han registrado peticiones por separado.