Conciliar la vida familiar con el trabajo. La Comunidad de Madrid quiere fomentar el teletrabajo y la flexibilidad laboral en la región para ayudar a los padres y madres en la crianza de sus hijos. Para ello, se concederán ayudas para contratar a nuevos empleados en remoto. Los equipos tecnológicos necesarios también se financiarán. De manera paralela, se ha creado una nueva línea de subvenciones para incrementar la productividad y competitividad en la industria.
El Consejo de Gobierno ha aprobado este miércoles una nueva inversión destinada a fomentar la responsabilidad social y la conciliación laboral durante 2024. Las ayudas, que se pueden solicitar ya a través de la sede electrónica, van destinadas a los autónomos, las pequeñas y medianas empresas que desarrollen su actividad en la región para que implementen estas políticas. En total, la partida asciende hasta los 5,6 millones de euros, un 12% más que el año pasado.
La conciliación entre la esfera personal y la profesional es uno de los ejes a tratar para incentivar la natalidad y apoyar la maternidad. El teletrabajo es una opción atractiva para muchas personas que se plantean formar una familia. En esta línea, la Consejería de Economía, Empleo y Hacienda busca que más empresas adopten esta modalidad a distancia e incluya horarios más flexibles, para lo que se habilitan ayudas de hasta 2.500 euros por cada puesto de estas características, hasta llegar a un máximo de 10.000 euros. De forma paralela, también se cubrirá con hasta 2.500 euros el coste de los equipos adquiridos o su renovación para trabajar desde casa, como ordenadores, sillas adaptadas o pantallas.
Los requisitos para ser beneficiario establecen que se deberá formalizar, al menos, un acuerdo de flexibilidad horaria o teletrabajo con un trabajador vinculado a la empresa, o contratar personal nuevo en la modalidad a distancia. Además, estos acuerdos tendrán que estar vigentes un año como mínimo, respetando la legislación vigente. Al establecer la jornada reducida, esta deberá ser de al menos el 75 por 100 de la de un empleado a tiempo completo. En el caso de aquellas empresas que quieran subvencionar los nuevos equipos, tendrán un plazo de tres meses para enviar la petición.
La otra línea de ayudas se orienta a subvencionar los planes directivos para obtener las certificaciones de normas o estándares de responsabilidad social que aplican los autónomos, las pequeñas empresas o sociedades civiles con personalidad jurídica que cuenten con hasta 50 trabajadores y un volumen de negocio y balance general igual o inferior a 10 millones de euros. En este caso, se sufragará hasta el 75% de los costes, con un tope de 2.500 euros por beneficiario, por implementar acciones encaminadas a luchar contra el calentamiento global, la pobreza, el hambre, proteger los ecosistemas, lograr la igualdad de género o una educación de calidad, entre otros.
Aumentar la competitividad en la industria
Además de fomentar la conciliación y la responsabilidad social, el Gobierno regional ha creado una línea de ayudas para incrementar la productividad y competitividad en la industria a través de incentivos para la adquisición de medios productivos. Con ellas se podrán sufragar los costes de 2023 derivados de la compra de locales y naves de uso propio, terrenos para la construcción de estas, maquinaria y equipamiento productivo, así como hardware y software para el desarrollo de los procesos de negocio. Solo se podrá solicitar para los gastos iguales o superiores a 75.000 euros y será compatible con otras de la misma naturaleza, siempre que la suma no supere los topes legalmente establecidos.
Las subvenciones serán de un 60% de los gastos, pudiendo llegar al 75% cuando la inversión se realice en centros de trabajo situados en municipios de menos de 2.500 habitantes. Esta medida está dirigida a compañías industriales de mediano tamaño, con una plantilla de entre 50 y 1.000 trabajadores, que estén radicadas en la región. El importe máximo de la ayuda será de 300.000 euros por beneficiario en tres ejercicios fiscales y podrán empezar a solicitarse quince días después de la publicación del extracto de la convocatoria en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid.
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