"Nos quisieron enterrar, lo que no sabían es que éramos semillas". Esta es, probablemente, la frase que mejor define la historia de la lucha por los derechos de las mujeres en España, que sobrevivió a una guerra y una dictadura que duró 40 años y que llegó justo cuando comenzaban a darse los primeros pasos en la emancipación de las mujeres, durante la Segunda República, con leyes como la del Divorcio.
Aunque para recuperarlas, hubo que vivir primero -y morir- los encarcelamientos, las torturas, las violaciones, los fusilamientos y la aniquilación de cualquier idea de igualdad y liberación que vislumbrase en la mente de las españolas. Ellas fueron desterradas a los hogares y a las cocinas, y la Sección Femenina de la Falange tuvo, durante mucho tiempo, el control de la educación y entretenimiento de las niñas.
Lo llamaron "la liberación de la mujer casada del taller y la fábrica" -como celebraba el Fuero del Trabajo- aunque en realidad, lo que se hizo fue prohibir el acceso de todas ellas a profesiones como la abogacía del Estado, el servicio de Aduanas, la inspección técnica del Trabajo, la fiscalía y la judicatura, entre muchas otras.
La primera manifestación del 8M en España
En los años 60, cuando las políticas franquistas comenzaban a relajarse y el turismo propiciaba la apertura de España al resto del mundo, las movilizaciones sociales impulsadas por las organizaciones vecinales de la clase obrera comenzaron a coger fuerza.
Fue en 1975, unos meses antes de la muerte del dictador Franco, cuando se produjo una tímida apertura hacia la igualdad con la reforma del Código Civil: ese año, la ley permitía que las mujeres casadas accedieran libremente al mercado laboral, sin el permiso de sus maridos.
Para 1978, solamente el 11% de las mujeres casadas trabajaba fuera de casa y un 73% de la población analfabeta eran mujeres. En este contexto se produce la primera manifestación del 8 de marzo en Madrid bajo el lema "Por un puesto de trabajo sin discriminación", a la que acudieron unas 6.000 personas. No duró mucho porque la respuesta de las autoridades fue contundente: la disolvieron con botes de humo y balas de goma. Aunque la semilla ya había dado sus primeros brotes.
¿Crees que hay igualdad de género en la UE?
Con el tiempo y la valentía de quienes se atrevieron a poner sus cuerpos en las calles y sus voces por la lucha de todas, el feminismo logró avances tan importantes como la despenalización de adulterio, la legalización del aborto o la entrada de las mujeres al mercado laboral y a la universidad, que supuso que, para el año 1983, el 46% de las matrículas universitarias fueran de mujeres.
Comentarios