Sumar carga sin ambages contra el que empieza a ser conocido como el caso Koldo, que llevó este miércoles a la detención de un antiguo asesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos por presuntamente haber cobrado mordidas en operaciones de compra de mascarillas durante la pandemia de Covid-19. Este jueves, la vicepresidenta segunda del Gobierno y líder de Sumar, Yolanda Díaz, calificó de "gravísimo" lo supuestamente ocurrido, mientras el portavoz parlamentario de la coalición, Íñigo Errejón, exigió que se investigue "hasta el final".
Díaz se refirió a este asunto en los pasillos del Congreso menos de 24 horas después de que se conociera la detención de Koldo García y otras 19 personas acusadas de delitos de organización criminal, tráfico de influencias y cohecho por supuestos sobornos a la hora de comprar material sanitario durante la pandemia, en 2020. La vicepresidenta aseguró que mantiene una comunicación fluida con el PSOE en relación a este asunto, y dejó claro que, a su juicio, el "modus operandi" de la trama "indica que presuntamente son formas corruptas", algo que calificó de "muy grave".
"Es grave cualquier forma de corrupción, pero más doloroso es que alguien se lucre cuando nuestro país estaba asolado por una pandemia y la gente estaba muriendo", zanjó Díaz. En la misma línea, poco antes, se había expresado Errejón, que denunció que este caso de corrupción es especialmente sangrante porque se produjo en "un momento en el que toda España tiene miedo" y con el fin de "lucrarse" aprovechando la "necesidad de urgencia" de mascarillas justo cuando "se relajan los controles públicos".
El portavoz calificó de "terribles" y "muy graves" las acusaciones contra Koldo García, y espetó que "eso es infame lo haga quien lo haga y tenga el carnet que tenga". Errejón recordó, además, que en su momento también se denunció el presunto cobro de comisiones del hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por adjudicaciones de contratos durante la pandemia en la Comunidad de Madrid. En ese caso, la Fiscalía Europea no vio indicios de delito.
El portavoz de Sumar insistió en que ese tipo de comportamientos pudieron producirse porque se "aflojaron los controles" ante la urgencia de adquirir mascarillas, y lamentó que casos así "siembran desconfianza" y alejan a la gente de la política. "Generan una especie de cinismo con respecto a las instituciones", planteó.
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