No habrá un nuevo intento de entenderse en el maltratado campo de la izquierda no nacionalista a la izquierda del PSOE, al menos a corto plazo. Pese al descalabro electoral que sufrió ese espacio este domingo en las elecciones en Galicia, en las que Sumar obtuvo un 1,9% de los votos y Podemos un 0,25%, los morados eludieron este lunes las preguntas sobre la posibilidad de retomar los contactos con la coalición de Yolanda Díaz, rotos desde hace meses. "Es fundamental dejar de hablar de nosotros mismos y hablar a la gente de las alternativas que tenemos para mejorar sus vidas", señaló a este respecto el secretario de Organización de Podemos, Pablo Fernández.

Así se pronunció el también coportavoz morado en la rueda de prensa ofrecida este lunes, apenas 12 horas después de que se certificara un nuevo batacazo de la izquierda no nacionalista a la izquierda del PSOE en Galicia. El análisis de Podemos para lo ocurrido el domingo, según Fernández, es claro: "El electorado progresista ha hecho el esfuerzo de concentrar el voto en el BNG" y los morados no han sido capaces de "ofrecer algo más". Eso sí: Fernández recordó que, vistos los resultados, "cualquier otra fórmula", incluida la coalición de Podemos y Sumar que rechazaron las bases moradas, "tampoco hubiera dado resultado para evitar la mayoría absoluta del PP".

Pese a los paupérrimos resultados de todo el espacio político, el número 3 de Podemos se limitó a señalar que la formación tiene que llevar ahora a cabo "una profunda reflexión". "El bloque [progresista] tiene que ser mucho más valiente, ambicioso y dar respuestas a los anhelos de la ciudadanía", señaló Fernández obviando que el BNG ha obtenido su mejor resultado histórico en Galicia. Y, lejos de valorar la posibilidad de intentar rehacer los entendimientos con otras formaciones, el dirigente señaló que Podemos se va a centrar en "mirar hacia delante", un horizonte en el que lo más cercano son unas elecciones en el País Vasco y otras al Parlamento Europeo en las que los morados se presentarán en solitario.

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"En Euskadi toca ser capaces de convencer a la ciudadanía de que hay una opción valiente capaz de transformar la vida de la gente, y en eso estamos", señaló Fernández, que planteó que "el proyecto de Elkarrekin Podemos tiene implantación territorial, muchísima representación institucional, y ese trabajo de base que quizás no teníamos en Galicia sí que existe en Euskadi". El principal objetivo de Podemos, no obstante, son las europeas, en las que los morados se juegan el todo por el todo con Irene Montero como candidata, y Fernández calificó esos comicios como "determinantes".