En qué casos puedes negarte a pagar una derrama de tu comunidad de vecinos

Escaleras de un edificio
Escaleras de un edificio
EUROPA PRESS
Escaleras de un edificio

En las comunidades de vecinos, las derramas pueden ser la fuente de muchas disputas. Este pago extraordinario se impone a los propietarios de una comunidad para financiar aquellos gastos imprevistos, como pueden ser obras de reparación o de mantenimiento. 

Los debates y discrepancias entre vecinos pueden venir por las cuantías que se hayan acordado pagar para una derrama, lo que hace surgir la siguiente duda: ¿puede un propietario negarse a pagar una derrama?

Por lo general, las derramas se plantean cuando surge una reparación urgente en el edificio y el fondo común de la comunidad de vecinos no alcanza para cubrir el importe de estas obras, de ahí que haya que aportar un pago extra por parte de cada propietario, recuerdan desde Idealista.

Por este motivo, y tal y como establece la Ley de Propiedad Horizontal en su artículo 10, un propietario no se puede negar a pagar una derrama que haya sido aprobada en la junta de propietarios, incluso si en aquel momento hubiese votado en contra.

Este artículo indica que, en el caso de que sean obras o trabajos necesarios para el adecuado mantenimiento y conservación del inmueble, así como para garantizar la accesibilidad universal, tienen un carácter de obligatoriedad. "Serán costeadas por los propietarios de la correspondiente comunidad o agrupación de comunidades, limitándose el acuerdo de la Junta a la distribución de la derrama pertinente y a la determinación de los términos de su abono", expone en el segundo apartado.

Asimismo, el mismo artículo añade que "los propietarios que se opongan o demoren injustificadamente la ejecución de las órdenes dictadas por la autoridad competente responderán individualmente de las sanciones que puedan imponerse en vía administrativa".

A pesar de ello, sí existe un tipo de derrama que el propietario puede negarse a pagar, y es aquella que responde exclusivamente a fines estéticos y no a su eficiencia, conservación o accesibilidad. Para poder manifestar esa negativa es imprescindible que el interesado vote en contra de esta derrama en la junta de propietarios.

También puede darse el caso de que una vivienda haya sido adquirida por un nuevo propietario, que ahora deberá asumir el coste de una derrama que no aprobó. En ese supuesto, desde Idealista aconsejan informarse debidamente a la hora de comprar una vivienda por si esta tuviese cargas de algún tipo. 

Esto viene recogido expresamente en el apartado 11 del artículo 17 de la Ley de Propiedad Horizontal: "Las derramas para el pago de mejoras realizadas o por realizar en el inmueble serán a cargo de quien sea propietario en el momento de la exigibilidad de las cantidades afectas al pago de dichas mejoras".

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