Orinar en la calle, no depositar la basura en los contenedores correspondientes para ello o hacer graffitis en el mobiliario urbano son varios de los motivos por los que pueden multar a un ciudadano en la vía pública. Estas sanciones oscilan entre los 50 y los 3.000 euros, depende de la gravedad de la infracción y de la ciudad donde se produzcan.
Pero el motivo por el que la Policía Local de Burgos multó a un vecino de la ciudad era, por muchos, desconocido de que esto fuera una infracción. Y es que la multa que se le puso fue por "sonarse los mocos con la mano, lanzando los fluidos nasales contra el suelo", según recoge el parte emitido por las autoridades e informa el Diario de Burgos.
Esta sacción se remonta al pasado 22 de junio de 2023, cuando en la zona de la calle Brivesca los agentes multaron a un transitante de la vía pública por realizar esta acción. La infracción fue considerada como leve y se encuentra registrada en el artículo 17 de la Ordenanza Municipal de Limpieza del Ayuntamiento de Burgos en la que "se establece la prohibición de arrojar o verter residuos ensuciando las vías o espacios públicos, incluida la realización de necesidades fisiológicas".
Según recoge el artículo, para este tipo de conductas se contemplan multas de hasta 600 euros. Por su parte, la propuesta de sanción a este ciudadano se quedó en 150,25 euros.
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