La crisis de agua y sequía por la falta de lluvias en Cataluña ha provocado que la Generalitat estudie declarar la emergencia en todo el territorio. Esto se traduce en una limitación del uso del agua tanto en establecimientos públicos como privados.
Los factores que han condicionado a que se active esta alerta han sido la falta de disponibilidad de recursos hídricos debido a que los embalses de las cuencas internas están a punto de llegar al límite del 16% de su capacidad total.
Es por ello que el gobierno regional decretará el estado de emergencia en el sistema Ter Llobregat —que abastece 202 municipios del área metropolitana de Barcelona y parte de Gerona— cuando este llegue al límite, algo que previsiblemente ocurrirá este mismo enero. Por ello, las restricciones podrían entrar en vigor el 1 de febrero, si no antes.
Este Plan de Sequía anunciado por la Generalitat tiene como objetivo paliar los efectos de las sequías a fin de garantizar en la medida de lo posible el abastecimiento de agua. En su comunicado oficial apuntan que este objetivo se podrá lograr mediante:
- El establecimiento de un sistema de indicadores de las situaciones de sequía para cada una de las unidades en que se dividen las cuencas internas de Cataluña.
- La definición de diferentes escenarios de sequía, la entrada y salida de los que se declara para cada unidad en función de los indicadores establecidos.
- La previsión de las medidas de gestión de los recursos hídricos y de las demandas de agua, así como de explotación de los sistemas para cada uno de los escenarios definidos.
Reducción del uso del agua por habitante y día
Una de las restricciones que se aplicará cuando se active el estado de emergencia por sequía en Cataluña será la reducción del consumo de agua a 200 litros por habitante y día para usos comercial, industrial, lúdico o personal.
En el caso de que la situación empeore, la Generalitat ha anunciado que se tendría que pasar a la fase II o III, en caso extremo, de emergencia. Esto implicaría reducir el uso del agua a 180 o 160 litros por día y habitante, respectivamente.
Riegue de las zonas verdes con agua freática
El uso de agua para riego de jardines y zonas verdes será otra de las restricciones que entre en vigor, aunque habrá excepciones. Estarán extensos aquellas zonas en las que se pueda emplear agua regenerada o aguas freáticas, como es el caso de los campos de fútbol o el arbolado público y viario.
Así pues, la vegetación en calles como Passeig Sant Joan o Avinguda Diagonal, los árboles de los parques del Laberinto de Horta, el Parc de la Trinitat o los del jardín del Teatre Grec en Barcelona podrán ser regados con este tipo de agua.
Hoteles y campings no podrán rellenar sus piscinas
Otra de las restricciones que se aplicará cuando entre en vigor el Plan de Sequía es que los campings y los hoteles no podrán rellenar sus piscinas. Por su parte, las que sí se podrán llenar son las piscinas terapéuticas de hospitales y centros de rehabilitación.
En el caso de las piscinas de los centros deportivos, durante la primera fase sí se permitirá el rellenado de aquellas que cuenten con actividades deportivas federadas. Si el Plan entra en fase II, los centros deportivos tendrán que cerrar las duchas si quieren llenar sus piscinas.
Por contra, los centros deportivos con piscinas descubiertas podrán rellenarlas, pero tendrán que cerrar las duchas desde la fase I de emergencia. Esto se debe a que en este tipo de instalaciones la evaporación del agua es mucho mayor que en las cubiertas, por tanto, el consumo para el rellenado es más elevado.
Aquellas piscinas que sean de agua salada también se mantendrán abiertas. La única condición que se impone a estas es que no desagüen en la red convencional, porque el agua salada perjudica las instalaciones depuradoras.
Cierre de las duchas de piscinas y centros deportivos
El Plan de Sequía también afecta al cierre de las duchas de piscinas, centros deportivos y gimnasios. Esta restricción será favorable para el rellenado de las piscinas.
En el caso de Girona, esta medida se comenzará a aplicar a partir de la semana que viene. Solamente abrirá las duchas después de los partidos que se disputen en centros deportivos y, en el caso de las piscinas, mantendrán abiertas únicamente las duchas a pie de piscina para poder quitarse el cloro.
Reaprovechar el agua de la ducha para el váter
El Ayuntamiento de Barcelona ofrece, a su vez, medidas propias para paliar la crisis de sequía en la ciudad a largo plazo. Entre ellas, destaca el proyecto de nueva ordenanza de aguas grises, que obligará a nuevas edificaciones y grandes rehabilitaciones a tener un depósito que sirva para aprovechar el agua del grifo o de la ducha para el váter.
Sonia Frias, gerente de servicios urbanos de Barcelona, apuntó que la tramitación para esta nueva ordenanza está prevista para el segundo semestre del año.
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