Ropa, calzado, perfumes y juguetes son algunos de los productos más expuestos a las falsificaciones. La circulación de copias ilegales supone en estos sectores la pérdida anual en España de 1.511 millones de euros en ventas y 15.044 empleos, según un estudio publicado este martes por la Oficina de la Propiedad Intelectual de la Unión Europea (Euipo) sobre el coste económico de las falsificaciones. El organismo alerta también sobre las consecuencias que las productos fraudulentos pueden tener para la salud y la seguridad de los compradores.
España es uno de los cinco países europeos en los que mayor impacto económico tiene la venta de falsificaciones, junto a Alemania, Francia, Italia y Austria. Según los cálculos de Euipo -basados en los datos recogidos entre 2018 y 2021-, en estas cinco economías los fabricantes de ropa, cosmética y juguetes pierden al año 11.043 millones de euros del total de 16.135 millones que se dejan de ingresar de forma lícita en el conjunto de la UE. Es decir, acumulan el 68% de la merma de ventas, así como el 50% de los empleos perdidos. De los 195.677 que se dejan de crear en todo el continente, 98.700 se aglutinan en estos cinco países
En concreto, la oficina europea con sede en Alicante estima que España deja de crear a causa de la venta de falsificaciones 11.208 empleos al año en la confección de ropa y calzado, 3.601 en el sector de la cosmética y 235 en la fabricación de juguetes. Este lastre para la creación de puestos de trabajo va acompañado también de la pérdida anual de 1.000, 398 y 113 millones de euros respectivamente en dichos sectores, lo que supone el 3,7% del volumen de negocio de la confección, el 5,5% en la industria cosmética y el 11,1% en el sector juguetero.
De este modo, la fabricación de ropa y calzado es el sector donde las pérdidas provocadas por las falsificaciones son más abultadas, aunque su impacto en el sector del juguete es más acusado. Esa misma tendencia se observa en el conjunto de la UE, donde la compra de copias ilegales genera cada año la pérdida del 5,2% de las ventas en el sector textil, el 4,8% en la cosmética y el 8,7% en el sector juguetero, lo que se traduce en mermas de 11.944, 3.169 y 1.022 millones de euros al año.
Más allá del impacto económico de las falsificaciones, el estudio de Euipo advierte de que la circulación de copias ilícitas alimenta el crimen organizado y conlleva un riesgo para la salud y la seguridad de los consumidores -especialmente los cosméticos y juguetes-, además de tener también un coste medioambiental. Según los datos del organismo, el 15% de los artículos falsificados que se incautan en las fronteras de la UE son productos de cosmética y juguetes "potencialmente perjudiciales".
En España, la Policía ha informado este martes precisamente sobre una operación contra la piratería que se ha saldado con el desmantelamiento en Madrid, Toledo y Alicante de nueve establecimientos y almacenes dedicados a la distribución y comercialización de zapatillas de deporte falsificadas. Agentes de Policía Nacional, Policía Municipal de Madrid y Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han intervenido más de 95.000 pares de zapatillas valoradas en casi 2,1 millones de euros.
"Los productos falsificados tienen costes reales para los consumidores, para las marcas y para nuestras economías", recalca el director ejecutivo de Euipo, João Negrão. La institución destaca en su informe la importancia de la concienciación de la ciudadanía para combatir el mercado ilegal de falsificaciones. Según el último estudio sobre la percepción de la propiedad intelectual publicado en junio por el organismo con sede en Alicante, un tercio de los europeos considera aceptable comprar falsificaciones cuando el precio del producto auténtico es demasiado elevado, una proporción que asciende hasta la mitad entre los más jóvenes.
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