Catalunya confirma una "tendencia a la baja" del dióxido de nitrógeno, NO2, en el aire, según un informe publicado por la Dirección General de Calidad Ambiental y Cambio Climático de la Generalitat. El estudio analiza la presencia atmosférica de este contaminante durante 2023 y su evolución anual. El documento concluye que la mayor bajada de NO2 en el ambiente se da en los centros urbanos tras aplicar medidas en movilidad.
La Dirección General de Calidad Ambiental y Cambio Climático de la Generalitat ha podido constatar que, durante este pasado año, "ninguna estación" de la Red de Vigilancia y Previsión de la Contaminación, XVPCA, ha superado los límites que la legislación establece para este contaminante. Las estaciones de la conurbación de Barcelona también registraron niveles por debajo de las recomendaciones.
Los registros de NO2 en el ambiente en 2023 se sitúan muy cercanos, o incluso inferiores en algunos casos, a los de 2020 y 2021, los dos años afectados por la pandemia en los que las emisiones bajaron de manera importante por la menor actividad. El estudio se ha realizado con los datos obtenidos en las mediciones de la Red de Vigilancia en los 65 puntos considerados para la evaluación fija o indicativa de la calidad del aire.
La mayor mejora se produce en los centros de las ciudades. En los últimos años, es estos entornos se han aplicado medidas para incentivar la renovación del parque móvil y reducir el tráfico, con medidas como la implantación de Zonas de Bajas Emisiones, ZBE. Según este informe de la Dirección General de Calidad Ambiental y Cambio Climático, estas políticas "están dando sus frutos".
Este organismo de la Generalitat también recuerda que la normativa europea se endurecerá "en breve", con nuevas rebajas de límites de contaminación admitidos. Por tanto, la Generalitat advierte que se tendrán que seguir implementando acciones para garantizar su cumplimiento.
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