El vocal de Comunicación de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (CAMFiC), Jordi Mestres, advierte de que estas semanas de Navidad son “complicadas” en los centros de atención primaria, con “mucha actividad y presión asistencial” por el incremento de las infecciones respiratorias habitual de la época. Señala que los equipos, “ya tensados”, se encuentran más reducidos por vacaciones de los profesionales, bajas también por gripe o covid-19 entre las plantillas y la huelga de enfermeras, que se nota más o menos según el centro pese los servicios mínimos garantizados. 

También hay un incremento “muy importante” de visitas a domicilio para atender a personas mayores y con patologías crónicas que la gripe u otras enfermedades pueden descompensar.

El doctor prevé que las infecciones respiratorias continúen subiendo en los próximos días, entre las celebraciones de Navidad y el retorno normalizado al trabajo y a las clases la semana que viene. Este médico de familia recuerda que el pico de la gripe, el virus que más circula ahora, se espera en la segunda o tercera semana de enero.

Los casos de gripe se han disparado en los últimos días y la incidencia de la enfermedad es la más alta desde que apareció la covid-19, con 153 casos por 100.000 habitantes (últimos datos de Salud). A pesar de que la covid parecería estabilizarse, los últimos datos están muy marcados por las fiestas y, de hecho, la semana pasada no se recogieron las muestras centinela, como normalmente se hace los lunes y martes. En los hospitales, sí que se han notado incrementos: hay 727 personas ingresadas con covid, 183 más que la semana anterior, y 24 en las UCI por la enfermedad, 11 más.

“El 8 de enero empieza la ‘vuelta a la realidad’ y probablemente vendrán las peores semanas a nivel de actividad. Sí que es verdad que las plantillas se recuperarán y lo viviremos diferente; nos tendremos que reorganizar para atender este incremento de la demanda”, afirma sobre la situación en los centros de atención primaria durante las fiestas de Navidad.

En estas dos semanas, Mestres explica que las plantillas quedan muy reducidas por las vacaciones y las bajas por enfermedades que también sufren los profesionales sanitarios. También hay una huelga de enfermeras con carácter indefinido desde el 12 de diciembre, convocada por el sindicato Enfermeras de Cataluña.

Sobre los pacientes con infecciones respiratorias que llegan a los centros de atención primaria (CAP) y de urgencias (CUAP), expone que hay un doble perfil: las personas que tienen un buen estado de salud previo y que muchas veces tienen un cuadro leve que se resuelve solo y aquellas que tienen patologías previas, sobre todo gente mayor que puede sufrir complicaciones importantes a causa de la covid y la gripe por su estado de base.

En este sentido, indica que la atención primaria está haciendo muchas visitas a domicilios y, como ejemplo, dice que, si antes los equipos hacían tres o cuatro al día, ahora son seis o siete.

Mestres pide “sentido común” a la población en este contexto de más contagios e insiste en las medidas conocidas, como pueden ser el uso de mascarillas cuando se tienen síntomas de infección respiratoria; quedarse en casa y minimizar los contactos con personas vulnerables cuando uno se encuentra mal y ventilar bien los espacios interiores.

Reorganizar la actividad de los CAP

Mestres cree que también hace falta un “cambio de organización” para que la actividad de la atención primaria sea “modulable” a lo largo del año y ordenarla según los flujos de más o menos presión. “No podemos trabajar igual en diciembre, enero y febrero, con el pico epidémico de la gripe, que otros meses”, observa.

“Tenemos que ser capaces de poner las cosas cuando tocan y dónde tocan. Podemos organizar en momentos determinados del año el seguimiento estándar de las personas con patología crónica estable, no hay que dejarlo para finales de año”, apunta el médico de familia, que también pide más personal e infraestructuras en la atención primaria.