A menos de 24 horas de dar a luz a su primer bebé con Bertín Osborne, Gabriela Guillén ha hecho una reflexión sobre su situación actual. Según afirma la revista Semana, la paraguaya parece sentirse sola y sin ayuda después de que el cantante haya preferido quedarse al margen en cuanto al nacimiento del pequeño. Está previsto que Guillén vea por primera vez la cara de su bebé este 31 de diciembre. 

Gabriela está viviendo este momento tan especial en su vida acompañada por su madre, la cual se ha convertido en uno de sus grandes apoyos durante estos meses en los que ha experimentado su primer embarazo sin el apoyo de Bertín Osborne. 

La fisioterapeuta, a pocas horas de dar a luz, ha compartido a través de su cuenta de Instagram una imagen en la que aparecen tres palabras: criticar, juzgar y ayudar. Detrás de cada una de ellas, se ve una interminable fila de personas, menos detrás de la última, la cual permanece vacía. Guillén ha acompañado la imagen con un breve texto: "No había visto una foto con tanta verdad". 

Gabriela Guillén pone una condición a Bertín Osborne para hacerse la prueba de paternidad cuando nazca su hijo

Más tarde, la paraguaya compartía otra imagen en la que aparecían dos personas, una lanzaba flechas desde su boca al pecho de la otra. Una metáfora que quedaba explicada en un texto en que decía:  "Las palabras matan, si la gente supiera que palabras equivocadas destruyen sueños, destruyen relaciones, destruyen autoestima, tendrían un filtro en la garganta. Si no eres capaz de alabar, de engrandecer, de admirar, de amar… quédate con tu boca cerrada". 

Gabriela Guillén y Bertín Osborne estaban teniendo una relación sentimental cuando la fisioterapeuta quedó embarazada. Al inicio, Osborne apoyó el embarazo, sin embargo, más tarde, el cantante aseguró que solo se haría cargo del bebé económicamente. 

Este cambio de parecer llegó después de que el presentador pidiese a Gabriela unas pruebas de paternidad. La futura mamá no se niega a hacerla, pero siempre y cuando se lleve a cabo en un instituto toxicológico. "Un sitio riguroso y con luz y taquígrafo, que no sería la primera vez que en un sitio alguien tiene un amigo", afirmó Beatriz Cortázar para esRadio.