La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, se ha mostrado este jueves "especialmente preocupada" por el avance de las obras de ampliación de la línea 11(L11) de Metro de Madrid a las puertas del Colegio Público Perú, situado junto al parque de Comillas (Carabanchel) por el que entrará la tuneladora. Rego ha avanzado que hará una petición por escrito para tratar de mediar con las administraciones madrileñas porque considera que existen alternativas "perfectamente viables".
En las inmediaciones del centro educativo, Rego ha subrayado que la ampliación de la línea 11 afectará hasta a 500 menores de las etapas de Infantil y Primaria. Los niños no solo han perdido el parque del que disfrutaban hasta ahora, sino que también van a estar expuestos a "polvo, ruidos, obras y al tránsito de camiones", según ha señalado la política.
En su visita al colegio, Rego ha estado acompañada de representantes de la asociación de vecinos Parque de Comillas, con su presidenta Elena Sigüenza a la cabeza; de miembros de la asociación de familias del Perú como Mikel Ogueta y de Quique Villalobos, presidente de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM).
"(Los menores) necesitan unas mínimas garantías ambientales a todos los niveles para poder tener una educación de calidad en su centro público", ha declarado la ministra, que ha aprovechado para reclamar que Ayuntamiento y Comunidad de Madrid den información que no están dando y detalles cuestiones sobre los plazos.
Rego ha remarcado que el Gobierno aboga por un "esfuerzo colectivo" que garantice la seguridad y los derechos de los pequeños y ha destacado que se hará una petición por escrito para tratar de mediar en la cuestión.
Mikel Ogueta, por su parte, ha pedido a la ministra que desde su posición "presione para que las alternativas técnicas viables se puedan hacer". "Las obras están a apenas 25 metros del colegio y no van a durar unos pocos días sino 40 meses, más las posibles prolongaciones que pueda haber", ha lamentado el representante de las familias, que ha destacado que el Ayuntamiento no ha transmitido ninguna medida "contra el ruido o el posible levantamiento de polvo u otros contaminantes".
Lla ampliación de la línea 11 ha sido especialmente criticada desde colectivos vecinales por la tala masiva de árboles que deriva de ella. Desde que se anunció la eliminación del arbolado de zonas como el parque de Comillas y Madrid Río se han celebrado múltiples manifestaciones que denuncian el impacto negativo de ellas y la existencia de alternativas.
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