La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha animado este miércoles al Gobierno central a leerse las reformas de la ley trans y LGTBI regionales, aprobadas el 22 de diciembre en la Asamblea de Madrid, para que comprueben que el nuevo texto es acorde con la normativa estatal. La respuesta de la dirigente del Ejecutivo autonómico se produce después de que el delegado del Gobierno, Francisco Martín, anunciara que la reforma se estudiaría desde Moncloa, ya que, los cambios introducidos suponen "un retroceso muy significativo en materia de derechos".
"Yo les animo a que se lean la propia ley, nos remitimos a la normativa estatal en numerosos puntos" ha expresado Díaz Ayuso, quien ha advertido, tras el último Consejo de Gobierno del año, que "van a tener dificultades para encontrar algún atisbo de inconstitucionalidad". La presidenta madrileña ha considerado que el único objetivo que tienen desde el Gobierno de España es "intentar colectivizar y adueñarse de supuestas causas, aunque lo único que consiguen es hacer más daño".
Martín manifestó este martes que la reforma legislativa aprobada en Madrid supone "un retroceso muy significativo en materia de derechos" para el colectivo LGTBI y la población en general. Para el delegado la situación que se ha producido es algo anómalo en nuestro país: "Es una realidad que no se había dado un retroceso de esa naturaleza en nuestro presente democrático". Ante este panorama y las reclamaciones de varias asociaciones y partidos a nivel regional, desde el Gobierno central están analizando el texto normativo "por si hay una colisión con la normativa estatal y podemos detenerlo. Nos preocupa", expresó.
Además, el delegado solicitaba a la presidenta regional una reunión y retomar un diálogo entre administraciones. "Reclamo la necesidad de una colaboración constructiva, leal y ese diálogo tiene que ser recuperado para centrarnos en encontrar soluciones a los problemas de los madrileños", expresó. Martín considera que acabar con la política basada en "generar problemas artificiales" que distraen y no permiten centrarse en las cuestiones importantes.
Ayuso ha sostenido que nunca se había visto hasta ahora que "un delegado del Gobierno actuara como un delegado del PSOE contra una comunidad autónoma de esta manera, con profunda deslealtad en cada una de las oportunidades que tiene por delante". Además, ha señalado que la reforma aprobada formaba parte de su programa electoral que apoyado con mayoría absoluta: "Les pido que respeten la voluntad de la inmensa mayoría de todos los madrileños".
Acabar con la ingeniería social
Desde la Comunidad de Madrid se justificó la reforma de las leyes trans y LGTBI ante la necesidad de aportar rigor jurídico y "descriminalizar" la asistencia de especialistas de la salud, para facilitar el acompañamiento de los menores trans. La presidenta del Ejecutivo autonómico indicó que con esta modificación se pretendía adaptar el marco normativo regional a la nueva ley nacional, a la que se remite en varios puntos del nuevo texto. Además, expuso que con estas modificaciones no se elimina "un solo derecho", ya que, todos "están en la propia Constitución".
Entre los cambios que se han introducido tras la aprobación de los textos el pasado 22 de diciembre, se incluye la necesidad de que los profesionales pediátricos realicen una evaluación para que los menores trans puedan iniciar un tratamiento hormonal. Además, durante el proceso se explicita el requisito de recibir atención psicológica en todo el proceso de transición.
También se elimina la práctica totalidad de las menciones relativas a las medidas en el ámbito educativo, derogando los artículos 29, 30, 31, 32 y 34 de la Ley 3/2016, de 22 de julio, de Protección Integral contra LGTBIfobia y la Discriminación por Razón de Orientación e Identidad Sexual en la Comunidad de Madrid. Y también el artículo 24 de la ley trans, relativo a los planes y contenidos educativos. Con la reforma desaparecen las menciones relativas a la identidad y a la expresión de género que las anteriores leyes empleaban y quedan sustituidas por términos como "condición sexual" y "sexualidad".
Con la supresión y modificación de estos puntos, el Gobierno regional pretende eliminar toda la "ingeniería social" que, según alegan, se había introducido en las aulas. Desde la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades manifestaron que las campañas de sensibilización y las charlas en los colegios continuarán impartiéndose, pero por profesionales cualificados.
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