Los profesionales sanitarios de Andalucía llevarán dispositivos individuales para protegerse frente a las agresiones

Dispositivo individual contra las agresiones a profesionales sanitarios.
Dispositivo individual contra las agresiones a profesionales sanitarios.
JUNTA
Dispositivo individual contra las agresiones a profesionales sanitarios.

Agresión física a una facultativa en la UCI del Hospital de La Línea, en Cádiz. Es el último episodio de violencia que se ha registrado en el ámbito sanitario en Andalucía, donde solo entre enero y junio de este año se han contabilizado 863 agresiones, de las que el 17,6% han sido físicas, según los datos del Servicio Andaluz de Salud (SAS). Un problema frente al que la Junta lucha con varios instrumentos, enmarcados en el Plan de Prevención y Atención a las Agresiones, que entró en vigor hace dos años, como las comisiones provinciales contra las agresiones; el Observatorio de Agresiones a Profesionales del Sistema Sanitario Público Andaluz; o la consideración de autoridad pública que la nueva Ley de Función Pública otorga a los sanitarios. 

Ahora, la Consejería de Salud y Familias ha puesto en marcha otra herramienta a modo de experiencia piloto, que se irá extendiendo progresivamente a todos los profesionales de la comunidad: un dispositivo individual para evitar ser víctimas de agresiones. Así lo ha anunciado la consejera del ramo, Catalina García, tras inaugurar la nueva UCI Pediátrica del Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz, que ha explicado que se trata de un aparato de tamaño reducido para que los profesionales puedan llevarlo en los bolsillos.

Al accionarlo, cuando el profesional crea que va a sufrir una agresión, emitirá una señal acústica de 125 decibelios y de luz "potente", que, además de disuadir a la persona que les va a agredir, llamará la atención y alertará a sus compañeros y al equipo de seguridad del centro. El dispositivo, "pequeño, discreto y resistente", se carga mediante cable USB y cuenta con capacidad de funcionamiento durante 30 minutos de forma continua.

Un total de 64 profesionales de unidades de Salud Mental de los centros periféricos de Especialidades del Puerto de Santa María y Chiclana de la Frontera y 287 del servicio de Urgencias del Hospital de Puerto Real han comenzado a probarlo como "una experiencia piloto" y han confirmado su eficacia, por lo que la Consejería prevé extender su uso entre los profesionales sanitarios de la región. "Estará a disposición de todos los profesionales sanitarios. Empezaremos por aquellos servicios donde sabemos que la tasa (de agresiones) es más elevada", ha indicado la consejera.

Catalina García ha señalado que este dispositivo se sumará a la ley para prevenir las agresiones y aumentar la protección de los profesionales sanitarios que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha anunciado que se va a desarrollar para "luchar contra una lacra". La consejera ha hecho un llamamiento a respetar a "unos profesionales que nos cuidan desde que nacemos hasta que morimos" y ha alertado de que "ningún problema puede justificar una agresión".

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