El feminismo ha vuelto a salir este sábado, 25 de noviembre, a las calles de las principales ciudades españolas con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Madrid ha sido de nuevo el escenario de la división de este movimiento: por un lado, a mediodía ha tenido lugar una marcha convocada por el Foro de Madrid contra la violencia a las mujeres (Foro 25N) y el Consejo de las Mujeres, a la que han acudido ministras del PSOE, entre ellas, la actual titular de Igualdad, Ana Redondo. Ya durante la tarde ha tenido lugar una segunda manifestación, convocada por la Comisión 8M, y a la que han asistido miembros del Gobierno de Sumar, dirigentes de Más Madrid y de Podemos, como la exministra de Igualdad Irene Montero.
Sobre este distanciamiento en el feminismo se ha referido la recién designada ministra de Igualdad, Ana Redondo, quien ha apostado por el "respeto y diálogo" para superar las diferencias entre las distintas sensibilidades feministas. "Mi primer mensaje es apelar a la unidad; da lo mismo dónde nos manifestemos", ha indicado Redondo. "Lo importante es que se escuche alto y fuerte la voz de las mujeres y la voz de todas las personas feministas contra la violencia, contra todos los tipos de violencias hacia las mujeres", ha añadido.
En este sentido, para la titular de Igualdad "es una lucha compartida, una lucha compleja", y en la que "no sobra nadie, todas somos necesarias, todas las personas somos imprescindibles en esta lucha", ha asegurado Ana Redondo antes de participar en la protesta de la mañana, que ha reunido a unas 2.000 personas, según la Delegación de Gobierno y 1.200, según la Policía.
Si Ana Redondo y otras ministras socialistas han protagonizado la manifestación de la mañana, a la de la tarde han acudido ministras de Sumar y dirigentes de Más Madrid y Podemos. La gran ausencia ha sido la de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quien no ha podido asistir a esta marcha porque tiene fiebre.
Encabezando una de las pancartas ha estado también la exministra de Igualdad y antecesora de Ana Redondo, Irene Montero, quien ha reivindicado su compromiso sin fisuras con los derechos de todas las mujeres y con el derecho a la libertad y a vidas libres de violencias de todas, "también de las mujeres trans, de las mujeres racializadas, de las mujeres en toda nuestra diversidad", ha apostillado.
Sobre la división del feminismo ante las dos marchas convocadas en Madrid, Montero ha tratado de quitar hierro al asunto. "Nos podemos manifestar de muchas maneras, el movimiento feminista siempre ha tenido debates, y eso es parte de su riqueza, y lo más importante es que todas asumamos nuestra responsabilidad como sociedad para acabar con todas las formas de violencia contra las mujeres y para vivir vidas libres de violencias machistas", ha insistido.
También la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, de Sumar, ha restado importancia a la división del movimiento feminista, al destacar que "lo importante es estar movilizadas en la calle" y que "haya una voz unitaria en torno a la lucha para la erradicación de la violencia contra las mujeres".
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