La Comunidad de Madrid tramita ya la orden para poder contratar médicos extracomunitarios en todas aquellas especialidades en las que haya un déficit de profesionales. La Consejera de Sanidad, Fátima Matute, ha anunciado la medida este lunes durante un desayuno informativo. En el mes de septiembre, el Gobierno regional habilitó ya la posibilidad de reforzar las plantillas de Medicina de Familia y Pediatría con facultativos procedentes de países de fuera de la Unión Europea.
"Antes del Día de Reyes vamos a poder contratar médicos extracomunitarios en todas las especialidades que creamos que sean necesarias: un cardiólogo, traumatólogos...", ha expresado Matute. La medida pretende reforzar el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) en aquellas áreas donde el volumen de facultativos es insuficiente para atender la demanda asistencial. Esta reforma se registró por el grupo parlamentario del Partido Popular en la Asamblea de Madrid junto a la modificación de otros textos legales como la ley Trans, LGTBI o la Cámara de Cuentas.
La consejera ha manifestado en diversas ocasiones que "faltan especialistas" debido a que "la tasa de reposición (de los profesionales que se jubilan) no se va a equilibrar con los médicos nuevos". Según los datos oficiales de 2022 del portal estadístico de Personal del Servicio Madrileño de Salud, un total de 8.059 médicos contaban con más de 50 años, lo que supone el 45,7 % de los 17.617 facultativos que hay en la región, y unos 5.687 superaban los 55 años, el 32,26% de la plantilla.
Desde la Comunidad de Madrid justifican esta medida alegando que se trata de profesionales médicos que están "magníficamente formados, donde se ha invertido un dinero, para que después no se les pueda contratar". La orden, que se aprobó en septiembre, permitía realizar a la administración contrataciones durante un plazo de tres años, sin necesidad de tener la nacionalidad o un acuerdo recíproco con el país de origen.
Reducir más las listas de espera
Además, la consejera ha aprovechado el acto para defender las "fantásticas cifras" que presenta la región en listas de espera, con los tiempos "más bajos" de demora, aunque se ha comprometido a "seguir trabajando" para mejorarlas.
Según los datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad, a días 30 de junio de 2023, unos 735.708 madrileños estaban en lista de espera para una intervención quirúrgica o a pendientes de tener una cita con el especialista, lo que supone un aumento del 54,98% respecto al mismo periodo en 2022. Sin embargo, la demora para una intervención quirúrgica no urgentes se sitúa en 45 días de media, frente a los 112 días de la media nacional. Por especialidades, la mayoría de las personas que aguardaban una operación correspondía a Oftalmología, con 13.856, seguida de Traumatología, con 11.340, mientras que los mayores tiempos de demora media se daban en Cirugía Plástica, con 58, y Cirugía Pediátrica, con 57.
En el caso de consultas externas, el tiempo de demora medio en la región es de 51 días, 36 menos que la media del conjunto del Sistema Nacional de Salud, fijada en 87 días. En este caso, Madrid es la cuarta región con menor tiempo de espera, por detrás de Melilla, con 29 días, País Vasco, con 44, y La Rioja, con 46.
"Como sabéis, en la Comunidad de Madrid tenemos los tiempos más bajos", ha presumido Matute, pero ha remarcado que pretender "seguir mejorando" estas cifras. La Consejería de Sanidad tiene en marcha un plan de listas de espera para el periodo 2022-2024 con el objetivo de reducir a la mitad los tiempos máximos de atención, según prioridad clínica, con un presupuesto de 215 millones de euros. El plan tiene como finalidad que la asistencia programada no urgente para cirugías, primeras consultas y pruebas diagnósticas se sitúe en un tiempo inferior a 45 días de demora media.
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