El Gobierno de la Comunidad de Madrid envía este martes a la Asamblea regional su proyecto de Presupuesto para 2024 para iniciar el trámite parlamentario y que el año que viene pueda empezar con uno nuevo en vigor, tras la prórroga de las de 2022. Las Cuentas regionales crecen en un 19,6% con respecto a las de hace dos años, hasta alcanzar los 27.558 millones de euros, la mayor dotación de la historia de la autonomía.
El récord de inversiones incluye mejoras de dotación a todas las consejerías, especialmente a las de Sanidad y Educación. La cartera que dirige Fátima Matute superará los 10.000 millones de fondos, unos recursos que se repartirán en iniciativas como el plan de choque para reducir las listas de espera para operaciones quirúrgicas y pruebas médicas, la mejora de la atención en los centros de salud o las obras de reforma de hospitales como La Paz y el 12 de Octubre.
Sanidad concentrará el 37% del gasto que prevé ejecutar el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso el próximo año. También se ha incrementado, hasta casi los 6.500 millones, las partidas de la Consejería de Educación, mientras que Vivienda, Transportes e Infraestructuras y Familia, Juventud y Políticas Sociales recibirán cerca de 3.000 millones cada una.
De acuerdo con fuentes del Ejecutivo, los Presupuestos son un "claro reflejo" del "compromiso" de la Comunidad con la inversión social porque el proyecto prevé destinar un 17% más, lo que se traduce en casi 3.200 millones según sus estimaciones, a políticas que "mejoran" la calidad de vida de los madrileños.
En el capítulo de mejoría la Comunidad de Madrid enmarca un "alivio" de la carga fiscal a los contribuyentes que cifra en más de 262 millones para el año que viene con medidas como la deflactación del IRPF o la deducción del 20% en la Renta para inversores que se establezcan desde el extranjero en la región y mantengan su residencia durante al menos seis años. Es una medida que aún no está aprobada, pero que Díaz Ayuso ya ha anunciado que entrará en vigor a lo largo del próximo ejercicio.
El grueso de la reducción de impuestos, hasta 153 millones, se corresponde con la deflactación del IRPF, mientras que el impacto fiscal de la deducción para inversores se calcula en unos 100, según los cálculos del Gobierno. La bajada impositiva que prevé ejecutar la Comunidad el próximo año se completa con un paquete de tres bonificaciones que aspiran a ser un mecanismo para luchar contra la despoblación, cuyo coste para las arcas públicas se ha estimado en unos nueve millones.
Díaz Ayuso tratará de incentivar los empadronamientos en cualquiera de los 73 municipios de menos de 2.500 vecinos con deducciones en el IRPF a menores de 35 años que trasladen su residencia habitual a estos pueblos y también a quienes compren o rehabiliten viviendas en ellos. Además, estas adquisiciones de vivienda tendrán bonificados los impuestos de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, según corresponda.
Presupuestos "realistas" y "rigurosos"
El Gobierno madrileño defiende que sus Presupuestos son "realistas" y "rigurosos" porque se han diseñado con una previsión de ingresos "prudente" y están alineados con "la estabilidad presupuestaria, la eficiencia en el gasto y el control de la deuda". En este sentido, desde la Puerta del Sol aseguran que Madrid tiene "la deuda más baja de España entre las comunidades de régimen común", que no llega al 14% de su PIB.
El proyecto de Presupuestos se ha elaborado, agregan, en un contexto regional con tendencias de "crecimiento económico y de creación de empleo". "En Madrid se crea uno de cada cuatro puestos de trabajo", remarcan, y la región ya supera los 3,5 millones de afiliados.
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