Desde que saltó a la luz el caso de Daniel Sancho, que confesó el crimen y descuartizamiento de Edwin Arrieta a principio del mes de agosto, y, como consecuencia, se encuentra encarcelado en una prisión de Tailandia, prudencia es la palabra que puede definir cómo están llevando el asunto los amigos del cocinero español.

"Son chicos que pertenecen a familias muy bien posicionadas, de una índole económica bastante fuerte, con buen nombre y que, evidentemente, filtrar información o aparecer en un medios de comunicación les puede condicionar en muchas cosas", ha explicado el periodista Nacho Gay de Antena 3.

Se refiere a cómo está actuando el entorno más cercano -y que no es familia- del hijo de Rodolfo Sancho. Se entiende, entonces, que lo que les pidió el actor, que no hicieran declaraciones públicas y mantuvieran silencio ante los medios, lo están cumpliendo a rajatabla. 

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Según destacan algunos medios, precisamente los amigos de Daniel Sancho podrían ser clave en el juicio que tiene por el asesinato y descuartizamiento de Edwin Arrieta, ya que podrían acudir a declarar el día que se realice para corroborar la versión del cocinero sobre el móvil del crimen y la frase que dijo este: "Me siento un rehén en una jaula de cristal". 

"Esto es importante porque ellos pueden declarar en el juicio, y, de hecho, creo que algunos lo van hacer, y justificar que ese acoso existía y que puede ser el atenuante más preciado por la defensa de Daniel en ese juicio", detallaba el mismo periodista en Y ahora Sonsoles.

Esta semana, Vamos a ver mostró, en exclusiva, el documento oficial que la Policía tailandesa envió hace solo unos días a la Fiscalía. En él, las autoridades del país asiático dejan claro que el crimen de Edwin Arrieta se habría cometido con premeditación tanto en el caso del asesinato como en el del posterior descuartizamiento.

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"Daniel Sancho mató a Edwin Arrieta intencionadamente con premeditación y enterró, ocultó, trasladó y destruyó el cadáver", señala el informe emitido por la Policía.

Todo un varapalo para Daniel Sancho en su intento de demostrar que no había premeditación en el asesinato confeso del médico colombiano. El Despacho Criminológico Jurídico Balfagón y Chipirrás ha emitido un informe en el que niegan que hubiera premeditación. Para demostrarlo se han aportado una serie de pruebas: la primera argumenta que Daniel Sancho habría comprado el cuchillo y la sierra para usarlos como chef, pues estos elementos se utilizan constantemente en la cocina tailandesa.