Un grupo de 62 grafiteros se coló durante la madrugada de este martes en la estación de Vall d’Hebron para vandalizar varios trenes. Se trata del peor ataque vandálico en toda la historia del Metro de Barcelona. Por el momento, los Mossos d'Esquara ya han detenido a 14 grafiteros y Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha informado que prepara una denuncia penal contra los autores.
Según la compañía, durante el ataque destrozaron la puerta de la estación, la barrera de validación de los abonos de transporte y varias cámaras de seguridad. Además, una vez llegaron a la andana agredieron al vigilante de seguridad y pintaron espacios de la estación, así como cuatro trenes, dejándolos inservibles.
Por este motivo, la línea L5 del metro se ha visto afectada a primera hora de la mañana y ha habido retrasos. “La menor disponibilidad de trenes ha causado un incremento del tiempo de espera a las personas usuarias de la L5”, ha publicado TMB en redes sociales.
Asimismo, han recordado que el “vandalismo grafitero pone en peligro la integridad física de los vigilantes de seguridad del metro. Estos actos perjudican a la ciudadanía y afectan a un servicio esencial como es el transporte público”.
La presidenta de TMB, Laia Bonet, ha condenado el ataque y ha avisado que desde la compañía actuarán "con la máxima contundencia y determinación".
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