Durante el mes agosto de 2023 se publicaba un estudio científico que revelaba que un cánido hembra rescatada en Brasil era el primer híbrido conocido entre el zorro de las pampas (Lycalopex gymnocercus) y un perro doméstico (Canis lupus familiaris).
Solo unos días después, el periódico británico The Telegraph publicaba que el cánido híbrido, único por sus orígenes, había fallecido a inicios de este año en extrañas circunstancias.
La muerte del animal no fue notificada por parte del centro de conservación y rehabilitación de fauna silvestre donde se encontraba, lo que ha provocado que se inicie una investigación desde la Secretaría de Medio Ambiente e Infraestructura de Río Grande do Sul para esclarecer el misterio.
Un accidente de coche y un cánido de aspecto extraño
En el año 2021, al sur de Brasil, el hospital veterinario de la Universidad Federal de Grande do Sul recibía a un cánido en edad juvenil herido tras un atropello de coche. Sin embargo, desde el primer momento, tanto la apariencia como el comportamiento del animal desconcertó a los profesionales veterinarios del centro, que no estaban seguros de encontrarse ante un zorro o ante un perro.
El animal, una hembra de tamaño mediano, emitía ladridos, presentaba músculos oculares característicos de los perros domésticos y tenía un pelaje cuyo color y textura se alejaba de lo típico en los zorros de la región. No obstante, poseía un hocico alargado, orejas triangulares y requería una dieta propia de un cánido salvaje, lo que aumentaba aún más la incertidumbre.
Su comportamiento también era intrigante. Aunque no se mostraba abiertamente dócil, carecía de las conductas agresivas que uno esperaría de un animal salvaje. Además, demostraba una sorprendente habilidad para trepar a arbustos, una característica típica del zorro de las pampas. Con el tiempo, ganó confianza con sus cuidadores, permitiendo que la tocaran y, tímidamente, comenzó a interactuar con juguetes. Tras su completa recuperación en el hospital veterinario, el animal fue trasladado al centro de conservación São Braz Mantenedouro, en la ciudad de Santa María, donde permaneció desde noviembre de 2021.
Fue entonces cuando Flávia Ferrari, una de las conservacionistas que había atendido al animal, se puso en contacto con el departamento de genética de la Universidad Federal de Pelotas, planteando el caso y sus dudas sobre el origen del enigmático cánido.
Estudio genético y resultados
Los resultados de un estudio de ADN mitocondrial, que se transmite exclusivamente por vía materna, arrojaron la primera sorpresa: este animal poseía 76 cromosomas. Para ponerlo en contexto, los perros domésticos cuentan con 78 cromosomas, mientras que los zorros de las pampas tienen 74. En el proceso de reproducción, la descendencia hereda la mitad de los cromosomas de cada uno de sus padres. En el caso de los perros, contribuyen con 39 cromosomas a su descendencia, mientras que los zorros de las pampas aportan 37.
Cuando los gametos de un perro se combinan con los de un zorro de las pampas, se crea un total de 76 cromosomas. Este número coincidía perfectamente con el recuento de cromosomas del ejemplar rescatado, confirmando así la singularidad de este híbrido y sugiriendo que su genoma probablemente procedía de una hembra de zorro de las pampas y de un macho de perro doméstico.
El estudio, publicado en la revista Animals, planteó la posibilidad de que, a pesar de que estas dos especies se separaron hace aproximadamente 6,7 millones de años y pertenecen a géneros diferentes, aún podrían generar híbridos viables. Un dato interesante es que solo existe un cánido vivo conocido que posee 76 cromosomas: el lobo de crín o aguará guazú (Chrysocyon brachyurus), una especie muy distante de los perros domésticos y de los zorros de las pampas en términos de apariencia y parentesco.
Es importante destacar que, a pesar de su nombre, el zorro de las pampas no guarda relación alguna con los zorros europeos o de América del Norte, que pertenecen a un género completamente diferente (Vulpes).
Giro inesperado y una investigación gubernamental
Antes de la publicación definitiva del estudio científico, el doctor genetista que realizó el análisis de ADN solicitó al centro de conservación fotos recientes del híbrido. Fue entonces cuando le informaron que la hembra había fallecido aproximadamente 6 meses atrás. No hubo fechas precisas de la defunción ni información sobre la causa.
La singular criatura bautizada como dogxim, fusión de perro en inglés y de graxaim-do-campo, el nombre común en portugués brasileño para el zorro de las pampas, parecía estar en perfectas condiciones la última vez que Flávia Ferrari la vio: “Cuando salió del hospital veterinario estaba sana, no había indicios de problemas, Periódicamente se le realizaban controles de salud y análisis de sangre”, ha indicado en una entrevista a The Telegraph.
El enigma se complica aún más por la falta de autopsia y la omisión de su muerte al departamento de medio ambiente, a pesar de los informes de salud enviados regularmente como parte de la gestión de estos centros de fauna silvestre. Esta situación ha llevado a la Secretaría de Medio Ambiente e Infraestructura de la región a iniciar una investigación exhaustiva sobre la muerte inexplicada y aparentemente encubierta de un animal que resultaba ser único en el mundo.
Referencias:
- Hybridization in Canids—A Case Study of Pampas Fox (Lycalopex gymnocercus) and Domestic Dog (Canis lupus familiaris) Hybrid. Revista Animals. Bruna Elenara Szynwelski y equipo. (2023)
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