IU reclama su cuota de protagonismo en Sumar y pide a su líder, Yolanda Díaz, que conforme una alianza estable en la que todos los partidos tengan el mismo peso, incluido el de la propia vicepresidenta, que ha de ser "uno más". Así lo planteará este viernes su coordinador federal, Alberto Garzón, en un discurso en el que también pedirá a Díaz que fije un calendario para convertir la coalición de 15 partidos que se presentó a las pasadas elecciones generales en una alianza permanente en la que las formaciones no se disuelvan, sino que estén todas al mismo nivel.
El borrador del discurso que pronunciará este viernes por la tarde Garzón, al que ha tenido acceso 20minutos, incluye un bloque de propuestas para la construcción de Sumar una vez pasadas las elecciones generales. Con ese movimiento, IU toma posiciones ante la reorganización del espacio a la izquierda del PSOE que ha iniciado Díaz y que pretende culminar con el congreso fundacional de su nuevo partido, al igual que ya hizo Podemos con su acto del fin de semana pasado y con sus constantes reivindicaciones de su "autonomía" como proyecto político diferente al de la vicepresidenta.
Garzón, ante la cúpula de IU, planteará este viernes que "la coalición Sumar tiene posibilidades de poder configurarse como un frente amplio", es decir, como una alianza permanente entre los 15 partidos que se presentaron juntos a las elecciones generales. Pero, para ello, el líder de IU considera que es imprescindible que esa organización compartida cuente "con mecanismos democráticos de coordinación en los cuáles todos los partidos y coaliciones se sientan cómodos, representados y por tanto partícipes". Y, entre esas formaciones, la de Díaz, "que está en formación desarrollando sus propias estructuras, sería un partido más".
No obstante, Garzón desliza que no es buena señal para iniciar este proceso que Díaz haya decidido llamar a su partido precisamente utilizando el mismo nombre que lleva la alianza de 15 organizaciones, entre las cuáles los directamente afines a la vicepresidenta son tan solo un sector, aunque mayoritario. "La dualidad de Sumar coalición y la existencia del partido Movimiento Sumar" ha "generado confusión" por "darse el mismo nombre al partido y a la coalición en un momento en el que todo está por concretar", critica el coordinador federal de IU.
Garzón también muestra su rechazo a la decisión de Díaz de excluir tanto a IU como a Podemos de las portavocías del grupo de Sumar en el Congreso, lo cuál les impedirá, por ejemplo, presentar iniciativas sin contar con autorización expresa de la vicepresidenta. "No podemos postergar más el objetivo de hacer partícipe a la ciudadanía y al pueblo de la política en nuestro país", y "es por ello que analizamos de forma crítica que se mantengan las portavocías que se designaron sin diálogo durante la campaña y que se hayan nombrado las portavocías en el Congreso de forma unilateral por la dirección del grupo", denuncia el discurso.
Ante ese escenario, Garzón planteará una hoja de ruta de dos fases para consolidar la alianza de 15 partidos y conseguir que sea permanente y que tenga órganos de decisión internos, todo ello sin que las formaciones se disuelvan. La primera fase de ese proceso comenzaría después de que se conformara un Gobierno y duraría hasta junio del año que viene, y en ella se debería establecer una "Comisión Coordinadora" con presencia de todos los partidos presentes en Sumar que serviría para, entre otras cosas, diseñar "un calendario y un reglamento" para celebrar un acto en el que se iniciaría formalmente la construcción del "frente amplio".
En esa segunda fase vendría todo el trabajo interno para levantar la alianza: en ella se "debatirá el modelo organizativo del frente amplio, la forma de participación de los y las inscritas, la forma de participación de los partidos y competencias de cada uno de los órganos aprobados", planteará Garzón a la cúpula de IU. Y el líder de la federación avisará de que "la construcción de cualquier espacio conjunto debe hacerse desde el reconocimiento y asunción de las personalidades jurídicas de las partes que participen en el mismo", lo cual significa que, "excepto la fórmula de partido político, cualquier otra puede ser válida". Es decir: que de ninguna manera los partidos integrantes de Sumar se diluirían.
Cinco prioridades para negociar con el PSOE
Más allá del futuro de Sumar, Garzón también planteará en su discurso un paquete de cinco propuestas que IU considera prioritarias para un nuevo Gobierno de coalición con el PSOE. Entre ellas destaca la puesta en marcha de un "plan de trabajo garantizado" con el cuál la federación apuesta por "crear un millón de puestos de trabajo" a través de la inversión pública, destinados especialmente a "jóvenes y parados de larga duración". "Para ello, será necesaria una inversión pública del 1% del PIB, y las áreas principales en torno a las cuales se crearán los puestos de trabajo serán tres: los servicios sociales, el cuidado del medio ambiente, las infraestructuras y el patrimonio y el sector sociocultural", señala IU.
Asimismo, Garzón apuesta por "intervenir el mercado de la vivienda" con el fin de controlar la escalada de precios. En concreto, esto supondría "congelar los alquileres" e "invertir el 1% del PIB en construcción y rehabilitación de vivienda pública", además de "dedicar las viviendas de la Sareb", el banco malo, "a alquiler social para menores de 35 años". "La intervención debe ser extensible a más sectores, como el de la energía o la alimentación, para desparasitar sectores estratégicos de la economía y abaratar precios", señala igualmente el borrador del discurso del líder de IU.
Para la organización también es capital la "construcción de un sistema estatal de cuidados" mejorando el presupuesto de los actuales servicios públicos y "ampliando los sistemas de protección", así como la puesta en marcha de un "plan nacional para avanzar hacia un modelo energético sostenible" que incluya la creación de una "gran empresa pública de energía" y la recuperación de las concesiones hidroeléctricas.
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