La expresidenta del Congreso de los Diputados Meritxell Batet deja la primera línea política y abandonará el escaño. Lo hace tras lograr que el PSC, formación de la que fue cabeza de cartel, fuera la primera fuerza en Cataluña en las pasadas elecciones del 23 de julio y "con la satisfacción del trabajo hecho y del deber cumplido". En su despedida también se ha mostrado segura de que "habrá un nuevo Gobierno de progreso liderado por Pedro Sánchez".

"Quiero comunicar que dejo la primera línea de la política y que he renunciado a mi acta de diputada tras 19 años intensos como diputada, ministra del Gobierno y presidenta del Congreso", ha lanzado la socialista a través de la red social X. En varios tuits, Batet ha señalado que ha elegido el "mejor momento" para dejar la política "activa" con "los grandes resultados electorales" que el PSOE obtuvo en Cataluña. Cabe recordar que el PSC superó los más de 1,2 millones de votos y se llevó 19 diputados. La segunda fuerza fue Sumar con casi medio millón de votos y siete escaños.

La expresidenta del Congreso ha dicho que se va con el "orgullo" de haber servido "a un proyecto colectivo que busca, por encima de todo, mejorar la vida de las personas y transformar la sociedad". Así, ha agradecido su confianza a Salvador Illa, primer secretario del PSC, y a Sánchez, presidente en funciones, del que ha dicho estar "convencida" que logrará un nuevo ejecutivo "que continuará con los avances y las reformas que la sociedad española necesita".

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Antes de dar este paso atrás, la socialista dio un paso al lado. Hace poco menos de un mes comunicó que no se volvería a postular para presidir el Congreso tras las presiones ejercidas por los socios del PSOE. Especialmente, ERC y Junts. También por parte de Unidas Podemos, cuyo portavoz Pablo Echenique tildó de "temeridad" la idea. Batet estuvo en el centro de algunas de las polémicas que vivieron los socios de Gobierno cuando, por ejemplo, retiró el escaño a Alberto Rodríguez, diputado 'morado' condenado por el Tribunal Supremo por agredir a un policía en diciembre de 2014 en una manifestación en La Laguna.

Antes de ejercer como la tercera autoridad del Estado -cargo que ocupó en la legislatura corta de 2019 y en la que finalizó hace pocos meses-, Batet ocupó durante menos de un año el Ministerio de Política Territorial. La nombró Sánchez en su primer gobierno, el que resultó de la moción de censura a Mariano Rajoy. El ahora presidente del Gobierno en funciones la eligió para la Ejecutiva Federal en su primera etapa en el partido. Sin embago, Batet apoyó a Patxi López en 2016, lo que le distanció durante unos meses.

Nació en Barcelona en 1973. Es licenciada en Derecho por la Universidad Pompeu Fabra, en la que daba clases de Derecho Constitucional; antes fue profesora de derecho administrativo. Dirigió entre 2001 y 2004 la Fundación Carles Pi i Sunyer de Estudios Autonómicos y Locales.