La casa real danesa anunció a comienzos de agosto, que el domingo 15 de octubre se celebrará una gran fiesta para conmemorar la mayoría de edad del primogénito de los príncipes herederos, Christian, llamado él también a ostentar un día la corona, tras su abuela, la reina Margarita y su propio padre. Será un acontecimiento donde habrá vestidos largos de tejidos exquisitos, chaqués impolutos y muchas tiaras y joyas de postín.

Este tipo de festejos, muy frecuentes en las casas reales europeas y a los que suelen ser invitados miembros de otras monarquías vecinas y amigas, son, por el contrario, poco o nada habituales en nuestro país. Por ejemplo, el 50 cumpleaños de los reyes, Felipe, quien los cumplió en 2018, y Letizia, que alcanzó esta edad en 2022, no tuvo más celebración que las privadas y familiares. Tampoco hubo invitados extranjeros cuando los reyes subieron el trono, en 2014, ni ninguna fiesta, aparte de los actos protocolarios y políticos correspondientes.

Del mismo modo que los monarcas españoles renuncian a festividades públicas, tampoco suelen acudir a otras cuando son invitados, salvo algunas bodas de mucho alcance, como la de Guillermo de Inglaterra y Kate Middleton y las de otros herederos. De hecho, la presentación oficial en sociedad de la reina Letizia -entonces ni siquiera era princesa todavía porque no se había casado- fue en el enlace de Federico de Dinamarca con la australiana Mary Donaldson, en mayo de 2004.

Korpa

Los príncipes de Asturias también acudieron en Estocolmo al matrimonio de la sucesora sueca, Victoria, con Daniel Westling, en 2010. Igualmente, han asistido a la entronización de algunos reyes, como los de los Países Bajos, Guillermo y Máxima. Con esta, se da la circunstancia de que la reina Letizia comparte amistad personal muy estrecha (en la intimidad la llama Max). Incluso sus hijas, la princesa de Asturias y la princesa Alexia, de igual edad, han estudiado juntas el bachiller internacional en el mismo internado, en Gales.

No viajaron a Jordania, sin embargo, en junio pasado, cuando el príncipe Hussein, heredero hachemita, se casó con Rajwa. Eso a pesar de la estrechísima amistad que une a Felipe y Letizia con Abdalá y Rania. En su lugar estuvieron los reyes eméritos.

Las hijas de los reyes, Leonor, que cumplirá 18 años en octubre, 15 días después que Christian de Dinamarca, y Sofía, que tiene 16, han sido convocadas otras veces a encuentros de esta categoría, por ejemplo, la mayoría de edad de la heredera noruega, la princesa Ingrid Alexandra.

De momento, ninguna de las dos ha debutado en estas fiestas, que se sepa. Y aunque la fiesta de Christian de Dinamarca contará con la presencia de otros miembros jóvenes de las casas reales, no es previsible que ni Leonor ni Sofía acudan de ser invitadas, como se supone. De este modo, no se podrán ver imágenes de las dos hermanas de largo y con diadema por primera vez.

Casa Real / Gustavo Valiente / EFE

La casa del Rey ha señalado a 20minutos que no hay constancia de esta convocatoria, para la que faltan dos meses, por lo que no se puede hablar de algo que ni siquiera ha sido informado. En cualquier caso, Leonor acaba de empezar su formación militar en Zaragoza, que abandonará con permisos especiales por razones muy relacionadas con su papel como heredera, como los premios que llevan su nombre y su juramento de la Constitución, cuando el 31 de octubre alcance la mayoría de edad.

Por su parte, la infanta Sofía partirá a Gales la semana que viene, para comenzar el curso a comienzos de septiembre, tal y como hizo su hermana hace dos años. De este modo, ni una ni otra estarían libres para asistir a Copenhague a los fastos por el 18 cumpleaños de Christian. Se espera que sí asistan otros jóvenes aspirantes al trono y la que se decía era novia del joven, Maria Chiara de Borbón Dos-Sicilias, hija menor de Carlos de Borbón, primo del Rey Juan Carlos, que lleva años reclamando los derechos de la Casa Real de las Dos Sicilias. Chiara, sin embargo, ha negado ese romance.