Cinco personas resultaron detenidas el pasado viernes por atentado a la autoridad. En concreto, a dos agentes de la Policía Nacional. Todo comenzó con una llamada a Emergencias, en la que una chica alertaba de un episodio de malos tratos en plena calle. Cuando los efectivos llegaron al lugar de los hechos, en el distrito madrileño de Usera, trataron de reducir al presunto agresor.

Sin embargo, este, junto a varios amigos que también se encontraban en el mismo lugar, comenzaron a agredir a los agentes, que acabaron necesitando traslado hospitalario. En el vídeo, que ya circula por redes sociales, se puede ver como estos jóvenes llegan a inmovilizar a uno de los dos policías que acudieron a la llamada de auxilio. 

Esta actuación ha suscitado gran polémica en Twitter, donde muchos usuarios critican el zarandeo que los jóvenes dieron a los agentes. No obstante, desde el Sindicato Unificado de Policía, su portavoz, Jacobo Rodríguez, achaca "la falta de contundencia" de los agentes a la "precariedad" y "la fiscalización de los agentes" en redes sociales. También asegura que se debe a una "pérdida del principio de autoridad" por parte de la sociedad. 

Mayores penas para mayor autoridad

En esta línea, Rodríguez defiende que deberían incrementarse las penas por atentado y resistencia a la autoridad. "Las instituciones tendrían que incrementar la cuantía de las multas, ya que muchas veces acaba siendo suspendida o reducida a una cantidad mínima", indica. Considera que este hecho es el que provoca que se haya "perdido" el respeto a los agentes de la policía y que, por ello, "cada vez se produzcan más incidentes de este tipo".

Además, comenta que los agentes deberían estar dotados con "más medios materiales". Entre sus propuestas, se encuentra la de dotar a los policías con una pistola táser. Cree que con este arma se reduciría el número de casos de resistencia a la autoridad. También pone de relieve que, en el caso de la actuación en Usera, solo había una patrulla en el lugar de los hechos. Asegura que si hubiese habido más agentes presentes, se podría haber evitado este suceso. "En las imágenes se puede ver cómo los dos policías estaban en inferioridad en número", apunta.

Por otro lado, aboga por poner en marcha una "formación permanente" entre los agentes. Define como "fundamental" el hecho de que los policías tengan que realizar prácticas "cada 2 o 3 meses" encaminadas a intervenciones como "reducciones".

Falta de medios

El último de los factores que el portavoz del Sindicato Unificado de Policía achaca a la falta de contundencia en los agentes que intervinieron al miedo a la "fiscalización de los agentes". "Hoy en día, siempre que actuamos, hay algún teléfono móvil grabando", explica. "No es la primera, ni va a ser la última, en la que circule un vídeo sobre la actuación de la policía y se someta a juicio en redes sociales", añade. Achaca a este hecho la razón por la que los policías no utilizaron mayor fuerza para reducir a los jóvenes que los zarandearon.

De hecho, en el vídeo, se puede ver como los policías tratan de "solventar el problema de manera dialogada". "El uso de la fuerza siempre tiene que ser el último recurso de un agente", explica Rodríguez.

"Si usamos demasiada fuerza, lo consideran abuso. Si utilizamos poca, dicen que nos quedamos cortos", indica. "Hagamos lo que hagamos, van a criticarnos", comenta. Esto es lo que motiva que, en algunas ocasiones, los agentes utilicen "menos contundencia" de la que debería. "Es muy fácil juzgarlo con un teléfono móvil, pero los que se juegan la piel sobre el terreno son los agentes".