La Junta de Andalucía ha querido poner en valor, en un contexto muy preocupante de sequía, la inversión que el Gobierno de Juanma Moreno ha realizado en un solo año en infraestructuras relacionadas con el agua, con una adjudicación de obras pública en 2022 de más de 400 millones de euros, lo que supone cinco veces más que la realizada en 2018, último año de Gobierno socialista.

Así lo ha expuesto este miércoles en comisión parlamentaria la consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, que ha detallado que la Junta invirtió el año pasado en este tipo de contratos públicos 423 millones de euros, lo que supone un 405% más que los 83,6 millones que se destinaron en 2018, antes de la llegada a San Telmo del PP.

Del total de la adjudicación pública que hizo el Ejecutivo andaluz el pasado año, el 42% correspondió a infraestructuras hidráulicas, según el último informe del Círculo de Empresas Andaluzas de la Construcción, Consultoría y Obra Pública (Ceacop), un dato que Crespo ha calificado como "récord histórico".

Además, la consejera ha anunciado que la Junta va a licitar en los próximos meses nuevos contratos de obra y proyectos de este tipo de infraestructuras por valor de 300 millones de euros, es decir, un "récord sobre récord" que pone de manifiesto, en su opinión, la "prioridad absoluta" que para la Junta suponen las políticas de agua.

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Obras en más de 80 municipios

Hasta el momento, la Junta ha impulsado proyectos para hacer frente a la sequía en Andalucía que han beneficiado, según ha destaco la consejera del ramo, a más de 3,2 millones de habitantes de 81 municipios de la comunidad. Y ello, gracias a los dos primeros decretos de sequía aprobados por el Gobierno autonómico por valor de 141 millones de euros, que se encuentran al 75% de ejecución. El tercer decreto, que vio la luz el pasado mayo, está dotado con 163 millones.

Entre las actuaciones que ya se han llevado a cabo, Crespo ha destacado los proyectos en presas y regadíos; "hitos importantes" en lo que a aguas regeneradas se refiere; adecuación de cauces; mejora del abastecimiento en alta; y acceso a agua desalada.

Más concretamente, la consejera ha hecho referencia a la conexión de los depósitos de la Pipa Alta y San Cristóbal de Almería; las actuaciones en la Sierra Sur de Sevilla y en la Sierra de Huelva; o la Autovía del Agua de Málaga.

Todo ello, ha recordado, en el marco del Plan de Soluciones y Obras frente a la Sequía (Plan SOS) que la Junta aprobó en octubre del año pasado y que está dotado con más de 4.000 millones de euros para los próximos cinco años. "Si no tenemos acceso al agua, la economía se para y tenemos una dificultad para el presente y el futuro", ha concluido Crespo.

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Choque con el Estado

La falta de infraestructuras hídricas en Andalucía ha sido en los últimos tiempos un motivo más de enfrentamiento entre la Junta y el Gobierno central, toda vez que la primera reclama al Estado que ejecute las obras que son de su competencia y que están pendientes desde hace varios años.

Este mismo miércoles, el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, ha vuelto a criticar la actitud del Gobierno y ha afirmado que "no tiene lógica que la Junta haya ido sola en la lucha contra la sequía", toda vez que, frente a los tres decretos de sequía autonómicos, el Estado "solo ha hecho un decreto de emergencia de nueve millones de euros", a pesar de que "tiene las competencias en el 78% del territorio".

El propio presidente de la Junta, Juanma Moreno, anunció hace unos días su intención de acudir a Bruselas en septiembre para reclamar medidas y ayudas para hacer frente a la sequía, toda vez, dijo, que tanto el Gobierno de España como la Unión Europea deben asumir la "singularidad" de Andalucía como "región más seca" del continente.

Los últimos datos sobre los embalses andaluces no son nada halagüeños. Tras haber vuelto a perder agua en la última semana, se encuentran en estos momentos al 25,15% de su capacidad, con poco más de 3.000 hm³ almacenados, según la última información ofrecida este martes por la Junta. Especialmente alarmante es la situación en el embalse de La Viñuela (Málaga), por debajo del 9% de su capacidad.

Un informe de la Consejería de Economía, Hacienda y Fondos Europeos sobre el impacto de la sequía en la economía revela que el PIB de Andalucía crecería un 2,1% más si se resolviera la falta de agua y de infraestructuras hídricas.