Según reconoció la propia Carmen Borrego hace unos días, vive los "peores momentos" de su vida. Ahora, según publica Semana, la hija pequeña de María Teresa Campos ha sido fotografiada al límite en plena calle. 

Según narra la publicación, la colaboradora se encontraba en Málaga, coincidiendo con las fiestas del Carmen. Horas después no pudo evitar llorar mientras descansaba con su marido, José Carlos Bernal, en una terraza. Tal y como se ve en las imágenes, Carmen necesitó de un abanico para recuperarse del sofocón en plena calle.

La ex de Sálvame está pasando una etapa muy dura, tanto por el delicado estado de salud de su madre como por su distanciamiento con su hijo o el fin del espacio del corazón. Sin embargo, su 'desesperación' no impide que siga con su vida. De ello habló hace unos días en una de sus entrevistas más sincera a la revista Lecturas.

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"Hacer este posado no es fácil. No tengo ganas de diversión, pero lo he hecho. Paso por mi momento más complicado, pero voy a tirar para adelante. Lo superaré", fue el contundente mensaje con que la televisiva demuestra sus intenciones de no perder la esperanza.

La malagueña asegura que, aunque le cuesta mucho hablar de sus problemas, actualmente se está apoyando en la religión. Es consciente de que "debería" estar en tratamiento psicológico, pero como así ha querido destacar, hablar de su madre le hace tanto daño que "prefiere callar": "Tengo mucho miedo a caer una depresión".

Por ello, conocer a su nieto ha sido "maravilloso". Carmen ha destacado la gran faceta de padre que tiene su hijo y deja claro que "nadie le ha negado ver a su nieto", aunque no explica si ha vuelto, o no, ha volver a estar con él.

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Por su parte, María Teresa Campos también ha podido ver a su bisnieto, aunque no sabe lo que está pasando, pues necesita "una rutina y tranquilidad". Quienes no han tenido el placer de conocer al niño son Terelu y su hija, Alejandra, pero Borrego no duda en decir que "lo conocerán" porque "no existe ningún conflicto".

Finaliza su entrevista haciendo una fuerte declaración, tanto hacia los negocios, como a todas las madres: "A las empresas les pido que me contraten. Y a las madres, que sean fuertes".