El caso del cachalote que apareció en la playa de Nogales, en La Palma (Islas Canarias), con una piedra de ámbar gris de 9 kilos en su interior, nos ha mostrado una práctica desconocida y sorprendente de la industria de los perfumes.
Resulta que las secreciones biliares de estos cetáceos tienen un enorme valor por culpa de los perfumes. Este ámbar gris es codiciado por su capacidad para fijar olores y aromas en los perfumes. Contiene ambreína, una secreción de colesterol.
¿Por qué el ámbar gris?
Las excrecencias de los cachalotes tienen aroma y no, no es nauseabundo aun viniendo de donde vienen. Al contrario, a los perfumistas les interesa el ambar gris por su aroma. Y más aún por otra propiedad: su capacidad para fijar olores.
Este ámbar es uno de los fijadores naturales más potentes que existen. Y eso es fundamental para la industria del perfume porque a una fragancia le pedimos que dure, que vaya con nosotros como la ropa. Gracias al ámbar un perfume aguanta vivo en nuestra piel durante horas.
Sustancia virtuosa, el ámbar gris tiene una tercera propiedad: es capaz de unificar los matices olfativos. En perfumería se habla de notas de salida, notas medias y notas finales, pues bien, el ámbar consigue que los aromas se vayan sucediendo, explican en Similar Parfum. Logra incluso que el propio perfume evolucione con el paso del tiempo.
El kilo, entre 50.000 y 80.000 euros
Lo habitual es que el ámbar gris sea defecado por el propio cachalote y quede flotando en el mar. O sea, que no es fácil de encontrar y por eso es tan caro. Tanto que se calcula que cada kilo vale entre 50.000 y 80.000 euros. Así, la piedra de ámbar hallada dentro del cetáceo muerto en La Palma, de 9 kilos de peso, podría tener un valor superior al medio millón de euros.
Gracias al ámbar un perfume aguanta vivo en nuestra piel durante horas
El ámbar gris también ha sido utilizado por sus propiedades saborizantes, medicinales y hasta afrodisíacas (esto último se "creyó" por un tiempo). En China, hace miles de años, se usaba para especiar el vino (le decían "fragancia de saliva de dragón") y en Egipto aún hoy se utiliza para perfumar los cigarrillos. Y en cuanto a lo medicinal, a este ámbar se le atribuyeron capacidades contra el asma o a favor del corazón y el cerebro.
Sustitutos del ámbar gris
El ámbar es un dechado de virtudes para la perfumería, pero es caro. Así que la industria ha sabido sintetizar una sustancia con un aroma semejante. Es el ambrox o ambroxan, que fue sintetizado en los años 50 y se suele usar como una de las notas base de composiciones de perfume, cuenta Academia del perfume.
"Da un efecto aterciopelado extremadamente duradero que oscila entre una impresión de ámbar gris (salado, liso, similar a la piel), almizclado y cremosa como ládano", detalla el blog Fragancia digital de Barri Perfumes. El ambrox se ha utilizado mucho en la elaboración de perfumes en las últimas décadas porque resuelve algunas de las limitaciones impuestas en el uso de almizcles como notas de fondo.
¿Es barato el ambrox? Paradójicamente, tampoco. Un kilo de esta sustancia no es tan caro como un kilo de ámbar gris, pero no es barato. Como señala Barri, el ambrox es relativamente costoso en el mundo de los materiales sintéticos por el aumento en los costos de las fórmulas de las empresas de perfumes.
Otro sustituto del ámbar es el esclareol. Se trata de un compuesto químico de la Salvia sclarea (de ahí su nombre). De olor dulce y balsámico, se sintetiza como un alcohol. Además de como fragancia para cosméticos y perfumes, el esclareol es utilizado por la industria alimentaria como aromatizante.
El ámbar amarillo
Existe también el ámbar amarillo, una esencia dulce y ligeramente seca que no es un ingrediente natural. Es el resultado de la mezcla de resina, vainilla y pachulí y se utiliza para equilibrar notas compensando los tonos ácidos y más sobrios con los dulces, explican en Divain Parfums.
El ámbar amarillo se crea en fábricas o talleres de perfumería y es mucho más barato que el ámbar gris. Es muy buen fijador de la fragancia incluso en objetos duros como botones o joyería. Se usa para perfumes, pero también para ambientadores o velas aromáticas.
El cachalote, una especie vulnerable
El cachalote (Physeter macrocephalus) es una especie de mamífero marino, único miembro del género Physeter y es una de las tres especies vivientes de la familia Physeteridae, junto al cachalote pigmeo y cachalote enano. Su nombre en castellano, según la RAE, viene del portugués cachalote, derivado de cachola, 'cabeza grande'.
Se estima que hay alrededor de 360.000 ejemplares de esta especie de cetáceo que está protegida prácticamente en todo el mundo. De hecho, la caza comercial ha cesado. No obstante, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el cachalote está señalado como vulnerable en las listas rojas de especies amenazadas.
Sus principales amenazas son los enredones en las líneas de pesca y colisiones con barcos. Otros peligros para su vida son la ingestión de desechos marinos, el ruido y la contaminación química.
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