Los dos mayores partidos de Bulgaria, el conservador GERB y la coalición reformista PP-BD, han acordado gobernar juntos, con un primer ministro que rotará cada nueve meses, una fórmula que debería poner fin a dos años de estancamiento político en el país más pobre de la Unión Europea (UE).

Así lo anunciaron este lunes en Sofía ambas formaciones políticas, al presentar sus líderes una declaración conjunta al Parlamento búlgaro, que de aprobarse permitirá la formación de un gobierno siete semanas después de las quintas elecciones generales celebradas en los últimos dos años.

"Está claro que había que buscar una solución difícil", dijo el exministro de Educación Nikolay Denkov, candidato a la jefatura del Gobierno de la coalición euroatlántica y reformista Continuamos el Cambio-Bulgaria Democrática (PP-BD) que previsiblemente asumirá en breve la función de primer ministro. Nueve meses después será sustituido en el cargo por la candidata del GERB, la exeurocomisaria Mariya Gabriel.

Denkov destacó que solo con esta complicada fórmula, por la que ambos políticos también se turnarán en el doble cargo de viceprimer ministro y titular de Exteriores, se logró un pacto que podrá contar con el apoyo necesario, de 121 escaños parlamentarios.

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Denkov valoró a Gabriel como una "persona que puede ayudar mucho en la realización de las prioridades más importantes del país", incluida su incorporación al espacio Schengen de libre circulación de personas y mercancías, así como a la zona del euro.

Las dos formaciones que asumirán el poder coincidieron en que las prioridades del nuevo gobierno, cuya composición aún no ha sido dada a conocer, son reformar el sistema judicial, la lucha contra la corrupción, elaborar un presupuesto público con un 3 % de déficit y mantener el apoyo a Ucrania.