Un armario desordenado puede ser una fuente de estrés y frustración diaria. ¿Te gustaría tener un armario más ordenado y con más espacio? ¿Te cuesta decidir qué ropa guardar y qué ropa donar o regalar? Si la respuesta es sí, te traemos un método sencillo y eficaz para organizar tu armario de forma más eficiente y práctica.

Se trata del ‘truco de la percha’, un sistema que te ayudará a identificar qué prendas usas más y cuáles menos, y así poder hacer una limpieza de armario sin remordimientos.

¿En qué consiste el ‘truco de la percha’?

El ‘truco de la percha’ o también conocido como el método de la suspensión inversa es muy sencillo de aplicar. Solo necesitas tantas perchas como prendas tengas que colgar en el armario, preferiblemente del mismo tipo y material para que quede más estético y uniforme. Las perchas de madera son las más recomendables, ya que no deforman la ropa.

El primer paso es vaciar todo el armario, limpiarlo bien y empezar a colocar toda la ropa desde cero. Pero hay un detalle importante: debes colgar todas las perchas al revés, es decir, con el gancho hacia fuera, todas en la misma dirección.

El segundo paso es ir usando la ropa normalmente e imponer una fecha límite (por ejemplo, el uso durante seis meses) y cada vez que te pongas una prenda, volver a colgarla en el armario con la percha en sentido opuesto, es decir, con el gancho hacia dentro. De esta forma, al llegar la fecha marcada en el calendario, podrás averiguar qué prendas usas con frecuencia y cuáles no.

Cómo organizar un armario sin cajones de forma creativa y funcional

Llegados a este punto y comprobar qué perchas siguen estando al revés, con el gancho hacia fuera, es el momento de deshacerte de esa ropa que, asumámoslo, seguramente no nos pondremos nunca, y liberar espacio en tu armario.

¿Qué hacer con la ropa que no usas?

Una vez hayas identificado la ropa que no usas gracias al ‘truco de la percha’, puedes darle diferentes destinos según el estado y el valor de las prendas.

Puedes donarla a alguna organización benéfica o a personas que la necesiten más que tú. Así estarás haciendo una buena acción y contribuyendo a una economía circular y sostenible.

Puedes optar por regalarla para algún familiar o amigo que le pueda gustar o quedar bien esa prenda. Puedes hacer un vídeo o unas fotos de la ropa y enviárselas a tus contactos para ver si les interesa algo.

Venderla en alguna plataforma online o en algún mercadillo de segunda mano es otra opción a considerar. Si la ropa está en buen estado y tiene alguna marca o valor especial, puedes sacarle algo de dinero y recuperar parte de tu inversión.

También puedes reciclarla o reutilizarla para otros fines. Si la ropa está muy deteriorada o rota, puedes cortarla en trozos y usarla como trapos para limpiar, como relleno para cojines o muñecos infantiles, como material para hacer manualidades o nuevos proyectos de costura y hasta para realizar juguetes para los animales de la familia.

Verás cómo con esta simple técnica del 'truco de la percha' organizar tu armario resultará mucho más fácil y rápido.