Pablo Motos no realizó este lunes el clásico baile de inicio de El Hormiguero a causa de la lesión que sufrió el viernes, ya que estaba con el brazo en cabestrillo.

"El viernes, practicando boxeo, me rompí el 90% del tríceps, fue una avería muy seria porque solo quedó un hilito sujetando el brazo y me tuvieron que operar de urgencia", recordó el presentador.

Admitió que "todavía estoy un poco afectado porque, a partir de ese momento, pasó todo muy deprisa y ha sido un milagro y, una vez más, me ha salvado la vida el doctor Ángel Villamor".

"Aparte de ser el mejor cirujano de España, es una persona única, con una bondad, generosidad y entrega. Nunca he conocido a nadie así en mi vida, si no llega a ser por él podría haber perdido toda la fuerza del brazo para siempre y parte de la movilidad. Me han librado de una gorda él y todo su equipo", afirmó el valenciano.

Qué es la rotura de tríceps, el desgarro muscular por el que Pablo Motos ha sido operado de urgencia

Tras su agradecimiento al doctor, también tuvo palabras para otra persona: "Le quiero dar las gracias a Maite Ocaña, que allí mirándome cuando entré en el quirófano, con ternura y haciéndome caricias para aliviar el susto que yo llevaba".

"La primera vez que me operaron, y ya llevo cinco, quiero ser un profesional de esto -señaló entre risas- entré en pánico en el quirófano y ahí estaba Maite, que ha estado en todas mis operaciones", rememoró.

"Y lo que hizo fue cogerme de la mano y mirarme con ternura hasta que la anestesia me durmió. Esa mirada no se olvida, Maite", reconoció Motos.

El conductor del programa de Antena 3 continuó diciendo que "esto, fuera de lo mío, lo cuento para subrayar lo importante que es la amabilidad en los médicos y en las enfermeras en momentos donde los pacientes estamos indefensos, muertos de miedo y sin saber qué va a ser de nosotros". 

"Seguramente eso no se estudia en la carrera, pero aseguro que es lo que marca la diferencia en un momento así", añadió. Volviendo a los agradecimientos a Villamor, el presentador afirmó que "es un cirujano de primera y cuando te están a punto de operar, en esos últimos momentos tienes mucha inseguridad". 

"Y lo último que hizo fue, antes de que yo me durmiese, fue darme seguridad. Me dijo: Pablito, esto está chupao. Te lo voy a dejar como nuevo para que en dos meses puedas volver a hacer el bruto. Así da gusto", comentó.

El valenciano quiso destacar que "la gente que salimos en televisión, los políticos u otro tipo de famosos podemos llamar la atención. Los médicos buenos son los héroes más valiosos de nuestra sociedad, así que cuidémoslos, por favor".

Para concluir, también tuvo palabras para Laura Llopis, su pareja: "También quiero darle las gracias a mi mujer que siempre pone un toque de humor y hace que cuando las cosas están jodidas se ablande la vida".

"Cuando salí de la anestesia, que no sabía muy bien todavía ni dónde estaba ni lo que decía, se me quedó mirando y me pidió que me pusiera de pie para hacerme una foto. Me dijo que era Supermanco", finalizó entre risas.