La futura estación de Madrid Chamartín-Clara Campoamor ya tiene definida su nueva cara. La terminal contará con un anillo comercial abierto, con entradas por todo su perímetro y quedará integrada entre la multitud de rascacielos que se construirán en esta zona tras el soterramiento de las vías. El intercambiador de transportes será el punto neurálgico del Centro de Negocios de Madrid Nuevo Norte, que ya comenzado a proyectarse y se levantará durante la próxima década.
Así lo han explicado los integrantes del Estudio Ben van Berkel, los ganadores para transformar esta estación, que han presentado este jueves 'Chamartín Ecosistema Abierto', donde se ha detallado todas las características con las que contará esta remodelación. Este acto ha contado con la participación de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, y la presidenta de Adif, María Luisa Domínguez.
El gestor público de infraestructuras ya explicó que la propuesta respeta la memoria histórica de Chamartín y recupera las bóvedas como elemento singular e identificador de la estación. También contarán con balcones urbanos (terrazas escalonadas), que generarán permeabilidad con la ciudad y se integran en el entorno, como prolongación de los parques situados a ambos lados del complejo.
La elección de 'Chamartín Ecosistema Abierto' permite desarrollar los trabajos a la vez que otras obras en la estación, como es el caso de la ampliación del vestíbulo sur, que ya se encuentra en marcha. Además, permitirá que no se pare la actividad de la estación.
"Junto al anillo externo permeable habrá un anillo interno que permite orientarse y que el viajero sepa dónde está. Habrá entradas en los cuatro laterales para acceder a esta estructura que permitirá ver los trenes, la playa (de vías) y los andenes que activan parte del zócalo", ha explicado el arquitecto Fermín Vázquez. Esto último, hace referencia a la creación de un espacio diáfano con el que los usuarios podrán acceder al vestíbulo desde los andenes de la estación, proporcionando una mayor movilidad.
En esta estación también estarán integradas las oficinas de Adif, en una de las torres que pasará a formar parte del skyline de Madrid. "Será un modelo de oficinas avanzadas, modernas, responsables con el consumo energético y que serán un lugar, desde el punto de vista del usuario, en el que todo el mundo tenga acceso", ha añadido el arquitecto.
La transformación de esta terminal proyectará más vías destinadas a alta velocidad, que pasarán de 6 a 12, "una vez concluya la construcción de cuatro nuevas vías pasantes y la conversión a ancho estándar de otras dos", ha indicado Adif. Además, la estación ofrecerá más capacidad para trenes y un tráfico más fluido y podrá gestionar la resolución de incidencias con más eficiencia. "Chamartín podría gestionar entre un 25% y un 30% más de viajeros diarios de Cercanías, hasta 900 trenes diarios", han añadido.
En cuanto al edificio de viajeros, estará compuesto de tres zonas: una de embarque para alta velocidad con doble altura, una para Cercanías y otra con un vestíbulo común longitudinal que será la principal vía de movimiento usuarios.
Desde el 4 de febrero, y hasta finales de diciembre de 2023, se abordará la ampliación del vestíbulo principal hacia el norte, el montaje de aparatos de vía y señalización entre las vías 1 y 6 y el acondicionamiento de los andenes 1,2 y 3, así como el refuerzo de estructuras en el ámbito de la plaza urbana. Todas las actuaciones representan una inversión de 326 millones de euros y en su desarrollo están involucrados más de 1.000 profesionales.
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