Un intento de huida de un incendio en un edificio de viviendas de Rubí ha acabado este miércoles por la mañana con la vida de dos mujeres y un hombre que residían en la primera planta. La investigación de los Bombers de la Generalitat apunta a que han fallecido por inhalación de humo al abandonar su piso, no porque se quemaran, pues el fuego se ha declarado en la entrada del bloque y se ha propagado rápidamente por la escalera y el agujero del ascensor.

Pep Colàs, jefe de intervención de los bomberos, ha señalado que en el vestíbulo del bloque -que está en el número 13 de la calle Saragossa, consta de unos bajos y otras dos plantas y tiene 31 viviendas- está el cuarto de los contadores de la luz. Sin embargo, no ha confirmado que el incendio se declarara en estas instalaciones. Por su parte, fuentes cercanas a la investigación han informado de que, como se hace siempre en estos casos, se indaga si algún vecino tenía la luz pinchada, aunque las primeras hipótesis no apuntan en esta dirección.

Colàs ha explicado que el fuego se ha declarado poco antes de las 7 horas y los bomberos han recibido el aviso a las 6.56. Se han activado 11 dotaciones de los parques de Rubí-Sant Cugat, Cerdanyola del Vallès, Terrassa y Sabadell, que han podido sofocar las llamas en cuatro minutos. Antes de llegar al lugar, ha contado, ya han visto una columna de humo intensa y negra.

Ha apuntado, asimismo, que el lugar donde se ha producido el incendio impedía salir a los vecinos del edificio, y que han localizado a los muertos enseguida, fuera de su piso. Después los bomberos han comprobado que las viviendas estuvieran correctamente cerradas y que ni estas ni el resto de habitantes del bloque, que no las han abandonado, hubieran sufrido daños importantes.

El Sistema de Emergències Mèdiques (SEM), que ha desplazado hasta allí seis ambulancias, ha atendido a 23 heridos leves por inhalación de humo y crisis de ansiedad, que han sido dados de alta 'in situ'. Además, su equipo de psicólogos se ha encargado de los vecinos y familiares de las víctimas.

Aunque el incendio no ha provocado daños estructurales en el edificio, sus habitantes, que han sido desalojados, no podrán volver a sus casas durante unos días debido a la falta de suministros. Por ello, se ha habilitado un club de petanca próximo como centro de acogida, ha indicado Protecció Civil, que ha añadido que la mayoría de las familias disponen de alojamiento alternativo, por lo que solo cuentan con tener que realojar a entre 10 y 15 personas.

Los vecinos han explicado que antes del fuego han oído una fuerte explosión, pero que desconocen los motivos. Reinaldo Márquez, que vive en la zona, ha contado que andaba hacia su coche para ir al trabajo cuando ha oído gritos de personas en la calle. Ha visto entonces el edificio en llamas y ha llamado al teléfono 112. Márquez ha dicho que ha sentido "impotencia" por no poder ayudar más, puesto que todas las ventanas tienen rejas y los vecinos estaban "desesperados" por no poder salir. Él los ha intentado tranquilizar y, al cabo de poco, han llegado los servicios de emergencias, que han podido evacuarlos quitando las rejas.

Al lugar del siniestro también se han dirigido efectivos de la Policía Local, los Mossos d'Esquadra y la policía científica, que investigan las causas del incendio.

"Hoy es un día muy triste para nuestra ciudad", ha afirmado la alcaldesa de Rubí, Ana Maria Martínez, que ha asegurado que han puesto los servicios municipales a disposición de las familias afectadas. El Ayuntamiento ha decretado tres días de luto.

Por su parte, el conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, se ha desplazado hasta la localidad, ha lamentado la muerte de los tres vecinos y ha expresado a los allegados de las víctimas mortales su apoyo "por esta desgracia".

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, también ha dado el pésame a los familiares y amigos de los fallecidos.