Joana Sanz no está pasando por su mejor momento. Y es que, aunque la modelo intente desconectar de las acusaciones a su marido, Dani Alves, por una presunta violación, el agobio que le genera la situación está pasándole factura.
Cierto es que, para mantener la mente ocupada, no para de trabajar. La canaria volvió a desfilar en la Fashion Week de Madrid y, tras ella, se fue a París por compromisos laborales.
Actualmente, se encuentra en Dubái, lugar donde comentó a los medios que se dirigía a este destino para "coger un poco de sol". Aun así, la modelo también está aprovechando su estancia en la capital de los Emiratos Árabes Unidos para acudir a diferentes eventos de moda que se están realizando.
En el último que se ha dejado ver ha sido en la inauguración de un centro de belleza, del cual la han nombrado madrina. Como era de esperar, Joana Sanz ha sido el foco de todas las cámaras, y es por ello que ha ofrecido algunas declaraciones a la prensa en relación con sus rutinas y cuidados de la piel.
"Ahora mismo se me está hasta pelando la piel del estrés", asegura la modelo. Uno de los motivos por los que le estaría ocurriendo esto, aparte de que Dubai sea un país caluroso y con humedad, sería precisamente el presunto caso de violación del que está acusado su marido.
Asimismo, confiesa que no tiene una rutina diaria definida, pero que, a raíz de este nombramiento, va a ponerse manos a la obra y va a seguir la denominada skincare "al pie de la letra". "Tengo una crema antiedad porque ya tengo 30 años", comenta entre risas.
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