El Govern ha aprobado un plan de equidad menstrual y de climaterio que prevé poner a disposición de todas las catalanas productos orgánicos gratuitos para la menstruación, con el fin de acabar con las dificultades de acceso que afrontan cerca de un 20 % de mujeres.
Así lo ha explicado en una entrevista la consellera de Igualdad y Feminismos, Tània Verge, quien apunta a un presupuesto de partida de más de 7,6 millones de euros para un plan que debe completarse totalmente en 2025.
Los productos se facilitarán a través de puntos de proximidad y de la red de servicios de atención a la mujer de la Generalitat de Cataluña.
Esta medida sigue la estela del plan "mi regla, mis reglas" por el que las alumnas de tercero de la ESO de los institutos catalanes han recibido un kit de copa, braga y compresa reutilizable.
El plan también incluirá formación específica para todo el personal que atiende a las mujeres, así como el fomento de la investigación médica en los campos de la menstruación y el climaterio.
La menopausia, un tema invisible
Igualmente, se prevé que antes del curso 2024/25 se incorporen asignaturas sobre la regla y la menopausia en los estudios de Ciencias de la Salud para mejorar la atención y acompañamiento de las mujeres y que vivan de forma "más digna" esa etapa de su vida, ha explicado Verge, refiriéndose especialmente al climaterio.
"La menopausia es incluso más invisible que la menstruación. Y está rodeada de muchos mitos y tabúes. Tenemos mucho desconocimiento sobre cómo cuidar de nuestra salud en esta etapa de la vida", ha señalado la consellera.
Sobre el climaterio, el plan también prevé medidas de salud laboral, materia que todavía tiene que incorporar en mayor medida la perspectiva de género.
"Si tu cuerpo no está igual cada día, ¿por qué se espera que trabajes cada día igual?", ha planteado.
Así, el plan apunta a llevar a la concertación social medidas de salud laboral, como la mejora de la ventilación o de espacios de descanso o higiene, así como extrapolar el plan de flexibilización horaria que ya tienen las funcionarias catalanas.
Se trata de un permiso recuperable de ocho horas a recuperar en los cuatro meses siguientes y que ya han usado desde octubre algo más de 200 mujeres (la mayoría docentes de los colegios e institutos públicos).
"Si fuéramos un Estado podríamos introducir directamente estas medidas, pero al no serlo nos queda el marco de la concertación social y del consejo de relaciones laborales", ha añadido la dirigente independentista.
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