Los terremotos producidos el 6 de febrero en Siria y Turquía han dejado, hasta la fecha, una cifra estimada de 47.000 fallecidos y más de 13 millones de personas afectadas de una u otra forma por los sismos.

Turquía se encuentra en estado de shock tras el peor desastre natural en la historia del país, por lo que las historias de rescates de animales y la reunión con sus cuidadores supervivientes son recibidas como un bálsamo y símbolos de esperanza.

Una de estas historias es la de Enkaz, que significa, literalmente, escombros, un gato de edad avanzada, rescatado varios días después de los temblores, por Ali Çakas: “Lo llamamos Enkaz porque lo sacamos del infierno. Puede sonar un poco desagradable, pero queríamos que fuera un recuerdo de esta experiencia”, explicó en una entrevista posterior.

Ali pertenece a la Brigada de Bomberos de Mardin, es miembro del equipo olímpico de ciclismo de montaña de Turquía y ha participado como rescatista en su país. En un bloque de viviendas colapsado de Gaziantep, el equipo de Ali Çakas rescató a cinco personas y a dos gatos.

Uno de los gatos pudo ser felizmente entregado a su dueño, también superviviente de los dos terremotos y sus réplicas, pero el otro, sin embargo, no fue reclamado por nadie.

Tal como ha contado el bombero y atleta profesional, desde el momento en el que rescató a este segundo gato, bautizado ahora como Enkaz, el gato no quiso separarse de él ni un instante, y le acompañó, durante todo el día, encaramado en su hombro. “El gato no se iba, y ese fue lo que llamó nuestra atención. Estamos tratando de obtener pistas porque tal vez encontremos a su dueño”, declaró en algunos medios de su país.

Enkaz mostraba heridas leves que pudieron ser curadas sin dificultades y el vídeo del animal junto a Ali dieron la vuelta al mundo y ha tenido más de 33 millones de reproducciones en el momento de escribir este artículo. Aunque aún sigue esperando que alguien pueda reclamarle, Ali Çakas ya ha anunciado en sus redes sociales que si eso no sucede, conservará a Enkaz consigo para siempre, además de convertirlo en la mascota oficial del Departamento de Bomberos de Mardin.

“Me encanta cómo los gatos simplemente deciden que alguien va a cuidar de ellos y esa persona no tiene más opción que aceptarlo”, ha publicado en sus redes sociales junto a Enkaz, “los gatos nos adoptan mucho antes de que nosotros los adoptemos a ellos. A veces las almas afines se encuentran y este gato se ha convertido en un amigo de por vida”.

Ahora, a más de 300 kilómetros de donde fue rescatado, Enkaz y Ali inician juntos una nueva vida.

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