"Eran incompatibles: a él le interesa la cultura y a ella el espectáculo", es una frase demoledora para decir después de una ruptura. Máxime si se trata de una que ha sido tan analizada con lupa como la que se ha dado entre Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler desde que todo saltase por los aires aquel 28 de diciembre en el que una presumible inocentada resultó ser una bomba dentro de las páginas del papel couché.

Ocho años de relación que han acabado con la socialite, que está a punto de cumplir los 72 años, arremetiendo contra el premio Nobel de Literatura, de 86, por haber mentado a sus hijos -en especial, por haberse "reído de Tamara Falcó"-, publicando las cartas que la exmujer de Mario, Patricia Llosa, enviaba a la casa de Puerta de Hierro, y con una foto que parece confirmar el regreso del literato y Patricia como pareja. Todo ello nos lleva a analizar la otra parte de la familia, de la que menos se ha hablado y a la que ha vuelto el escritor, escaldado de su paso por el circuito celebrity, como padre pródigo.

Para entender esa rama familiar hay que remontarse a mayo de 1955. En aquel entonces, un Vargas Llosa que acababa de cumplir la mayoría de edad, y aún no era el gran nombre de las letras que hoy en día es, ve cómo todos sus allegados le dan la espalda al contraer matrimonio, a la edad de 19 años, con Julia Urquidi, hermana de su tía política por parte materna. Esta mujer, que inspiraría el libro La tía Julia y el escribidor, era una década más mayor que Mario y se había divorciado poco antes.

Los traductores franceses de Mario Vargas Llosa, felices con la reconciliación del escritor con Patricia Llosa

Su aventura juntos, que coincide con sus primeros trabajos, publicaciones y estancias en París y Madrid, entre otras ciudades, acabaría en 1964, cuando se separan. Si bien Mario Vargas Llosa no se va muy lejos en el organigrama familiar para encontrar a su segunda esposa: Patricia Llosa Urquidi. Ella es la sobrina materna de Julia y, a su vez, prima hermana del escritor. La boda entre ambos tuvo lugar un año después, en 1965, en Lima, capital de su país natal, Perú.

Estuvieron juntos medio siglo, hasta que en 2015 unas fotografías de Vargas Llosa con Isabel Preysler obligan al literato a explicar públicamente que está separado de su esposa, aunque el divorcio llegaría en 2016. Pero, en el tiempo en el que estuvieron juntos, nacieron sus tres hijos, Álvaro, Gonzalo y Morgana, que en los años venideros les darían ocho nietos. Los tres hijos se posicionaron del lado de su madre tras su separación, si bien poco a poco han ido recuperando la relación con su padre y apoyándole en esta nueva etapa.

El primogénito, Álvaro, futuro heredero del marquesado de Vargas Llosa, nació en 1966 y es periodista, escritor y conferenciante desde que se graduó en Historia Internacional en la London School of Economics and Political Science. Tiene tres hijos, Julio, Leandro y Aitana, aunque se acabó divorciando de su esposa, Susana Cecilia Abad Lanata. Según la revista ¡Hola!, Álvaro estaría saliendo con Nada Chedid Ziade, trabajadora libanesa del Instituto Cervantes de Beirut.

Es quien más comprensivo se ha mostrado siempre con su padre y su portavoz sobre los temas de los que Mario prefiere no hablar en público. Asimismo, en ocasiones ha ejercido casi de Relaciones Públicas de su padre. "Mi padre está fantástico, está terminando su nueva novela y está dando los últimos toques a su discurso de ingreso a la Academia Francesa en febrero", dijo poco después de que saltara la noticia y refiriéndose a cómo, este pasado jueves, y a pesar de tener en contra a multitud de intelectuales franceses que le consideran "un ultra de extrema derecha", ha entrado en la prestigiosa institución gala.

El segundo de sus hijos es Gonzalo, quien es alto comisionado de las Naciones Unidas para ayudar a los refugiados en Europa. Tuvo una relación esporádica con Genoveva Casanova tras su separación de la chilena Josefina Sais en 2007. Con ella precisamente había tenido a sus dos hijas, Josefina y Ariadna. La mayor, analista de estrategia en un programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, vive en Nueva York y se casará esta primavera con Emiliano Camarena; la menor, por su parte, se dedica al mundo de la moda y organización de eventos y reside desde hace un par de años en Dubái.

Gonzalo siempre ha sido mucho más hermético, reservado y discreto que su hermano mayor, si bien cuando ha hablado ha sido directo. Sobre su padre dijo: "Si el año en el que abandonas a tu esposa tras 50 años de matrimonio y dejas de hablar con tu hijo es el más feliz, entonces eso no habla bien de ti. Está bien que lo piense, pero ¿por qué decirlo públicamente? Lo encontré de poco gusto y, además, doloroso".

Y sobre Isabel Preysler: "En estos dos años y medio desde que comenzó su relación con mi padre, la señora Preysler no ha invitado ni una sola vez a mis hijas a comer o a cenar en privado para poder conocerlas. [...] Y no lo ha hecho porque su único interés es la publicidad".

Por último, la pequeña, Morgana, nacida en 1974 en Barcelona, se crió en Lima y estudió Historia, como su hermano, en el London School of Economics, en Reino Unido. Casada desde 2006 con Stefan Reich Roden, tiene dos hijas, Isabella y Anaís, es fotógrafa profesional habiendo ejercido también el fotoperiodismo para el diario El País en países y conflictos como los de Kosovo, Albania, Palestina e Israel o Ecuador.