El Benidorm Fest servirá este fin de semana como un bálsamo oportuno para el sector hotelero del municipio, que ha sufrido un enero problemático y marcado por el cierres de varios hoteles ante la caída de ventas de plazas del programa del Imserso. 

La patronal hotelera Hosbec asegura que la cita musical supondrá un retorno económico de 13 millones de euros y la plataforma BionTrend —una herramienta de inteligencia estadística que impulsó Turisme Comunitat Valenciana junto a la patronal hotelera— calcula una ocupación media del 80% en hoteles de 3 estrellas y 95% en los de categorías de 4 estrellas y superiores.

Cifras elevadas para un mes de febrero pero “no suficientes para paliar la débil ocupación de la segunda quincena del mes de enero 2023” y la ocupación "muy, muy floja" de diciembre, lamentan desde Hosbec. Media docena de alojamientos decidieron de hecho por bajar la persiana y optar por una especie de hibernación. La próxima semana esperan poder reabrir por la reactivación de actividad coincidiendo con las reservas de San Valentín.

¿A qué se debieron los cierres? La clave está, sobre todo, en el diseño del Imserso, un programa pensado para ofrecer hoteles a bajo precio a las personas mayores y, de paso, animar las reservas en invierno, es decir, en la temporada baja del turismo de sol y playa. Sin embargo, el alza en la inflación del último año ha elevado los costes y, por tanto, bajado la rentabilidad para los hoteleros. Además, como el precio es el mismo de octubre a mayo (los meses de vigencia del programa), muchos usuarios prefieren reservar partir de abril, de cara al buen tiempo.

Esta es una de las principales deficiencias que en opinión de la secretaria general de Hosbec, Nuria Montes, hacen que el diseño del plan sea "desastroso". Según explica, "ya les advertimos que no puede ser que cueste lo mismo venir una semana a Benidorm o a cualquier otro destino en enero que en mayo". Critica que no haya una obligación de distribuir la venta de plazas por meses para romper la estacionalidad, lo que hace que los mayores "reserven para garantizarse una mejor climatología y poder disfrutar de la playa".

Montes lo define de forma gráfica: "En marzo, abril y mayo estaremos que nos saldrán los turistas por las orejas, pero en la temporada baja necesitábamos apoyo y no lo hemos tenido", explica. "No nos hacen caso", añade.

La cuantía diaria actual del programa está en 22 euros por persona y día. Incluye pensión completa, vino y agua, wifi y animación en hoteles de tres o cuatro estrellas. Esta cantidad es la que recibe el hotel. De ella, el usuario aporta alrededor del 80% del precio final y el 20% lo pone el Estado mediante una subvención. Este paquete lo ejecuta un turoperador, que es el que gana el concurso, y retribuye al hotelero con los mencionados 22 euros por persona y día.

La principal crítica de los hoteles es que no refleja la estacionalidad y que el precio sea el mismo de octubre a mayo. "Debería ser más barato en temporada baja, en diciembre, enero y febrero, lo que beneficiaría quizá a los jubilados con menor poder adquisitivo", sostiene Montes.

La actualización de los precios ya provocó un choque interno en el seno del Gobierno central entre el PSOE y Unidas Podemos, y más en concreto entre las titulares de Turismo, Reyes Maroto, y de Derechos Sociales, Ione Belarra. Mientras la primera hizo suyas las críticas del sector turístico y pidió a la segunda que considerara un aumento de los precios, finalmente el programa se prorrogó sin subir "ni un céntimo" las estancias, como defendieron desde el Imserso. Este desencuentro también se trasladó al Ejecutivo valenciano, cuyo presidente, Ximo Puig, criticó la congelación de precios.

De hecho, Turisme Comunitat Valenciana, dependiente de Presidencia y en manos del socialista Francesc Colomer, activó una línea de ayudas directas de 5 millones de euros para complementar el programa del Imserso de 2022, a la que finalmente se han acogido 51 hoteles. Este programa contemplaba una subvención de 6,70 euros por día y habitación efectivamente ocupada. Sin embargo, no se ha llegado a agotar el total presupuestado por el bajo nivel de reservas contratadas en diciembre, y el importe adjudicado ha sido de 4,08 millones de euros, según Turisme.

Según su titular Colomer, estas ayudas "van a permitir que unas 150.000 personas mayores puedan seguir disfrutando de nuestra oferta turística", cifra que podría incrementarse hasta los 180.000, ya que la Comunitat "es uno de los destinos que antes agota la totalidad de las plazas que se ofertan" mediante el Imserso.

3.000 empleos directos

Se estima que los hoteles que participan en el Programa de Turismo del Imserso en 2022, con alrededor de 5.700 habitaciones y 11.400 plazas, representan el 20% del total de la oferta a nivel nacional. La ayuda complementaria que otorga Turisme supone dar continuidad a una actividad "muy necesaria para el mantenimiento, fuera de la temporada alta, de la actividad turística, garantizando con ello 3.000 puestos de trabajo directos y otros 7.000 indirectos", según Colomer.

Turisme CV insistió el pasado mes de diciembre al Gobierno central para que "escuche al sector y llegue a un acuerdo beneficioso para todos, antes de aprobar los próximos pliegos de la licitación" del Plan del Imserso.